La guerra de Rusia contra Ucrania ha causado estragos no solo en los civiles, sino también en los soldados de ambos bandos que han salido muy afectados física y emocionalmente hablando. Tal fue el caso de un elemento ruso que decidió quitarse la vida aventándose desde un décimo piso. Esto lo hizo un día antes de su regreso a la zona de combate. Su nombre era Mikhail Lyubimov y solo tenía 25 años. El joven fue visto por última vez por su madre, una operaria de limpieza del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia. La mujer narró que lo observó saltar desde una ventana de su departamento. Este trágico hecho se suma al considerable aumento de suicidios que las autoridades rusas consideran un "encubrimiento" vinculado al actual conflicto bélico.
El soldado sufría ataques de pánico por su regreso al campo de batalla
Mikhail Lyubimov había reportado padecer ataques de pánico, además de que comenzó a beber mucho alcohol por su temido regreso a la zona de combate, al menos así lo reportó su madre, Natalia —de 43 años— que actualmente se desempeña como operaria de limpieza en el edificio diplomático de la administración de Vladimir Putin, a cargo del ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov. El joven de 25 años había servido como recluta en la Armada de Rusia —rama naval de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa—. Pero luego del comienzo de la guerra, fue reclutado como soldado para combatir en el frente contra Ucrania. Se sabe que se suicidó en el distrito sur de Moscú, Tsaritsyno, en su primer descanso de la acción. Solo un día antes de que se presentara para otra temporada en el frente, decidió quitarse la vida.
De acuerdo con un informe policial de los hechos, su madre, Natalia, dijo que vio a su hijo saltar por una ventana de su departamento en el décimo piso. La mujer rápidamente llamó a la policía y a una ambulancia, pero el hombre no pudo ser salvado. Medios locales destacaron que cuando el joven fue enviado al combate —en octubre del año pasado—, su novia de mucho tiempo, Ksenia, publicó en sus redes sociales una sola palabra despidiéndolo: '"Regresarás".
No es un caso aislado, otros hombres se suicidaron para no ir a la guerra
Este caso solo se suma a los centenares que han surgido de otros hombres que decidieron quitarse la vida en lugar de acudir al campo de guerra con Ucrania. Sin embargo, hay afirmaciones de que ocultan la cifra real, ya que no han dejado que el ojo público se entere. Tal es el caso de Vladimir Potanin de 46 años, originario de Kurgan —una ciudad del suroeste del Distrito federal del Ural de la Federación de Rusia a orillas del río Tobol—. De acuerdo con los informes se suicidó con una hoja de afeitar en un centro de entrenamiento en la región de Sverdlovsk —otra demarcación rusa—, esto a menos de una semana de haber sido movilizado.
Otro hombre de 28 años fue movilizado desde Shushary —región de San Petersburgo—, y en consecuencia, se quitó la vida en otro centro de entrenamiento en Vyborg el 2 de octubre del año pasado. Alexander Ivanov de 57 años, un teniente movilizado de San Petersburgo, fue encontrado muerto en el pueblo de Krupets, región de Kursk, antes de ser enviado al frente. Un caso más, el de Denis R, de 33 años, fue movilizado de Revda, región de Sverdlovsk, se quitó la vida en la región de Belgorod poco antes de que fuera enviado a Ucrania. Los informes también dicen que los reclutas que se niegan a alistarse, a menudo son retenidos en prisiones improvisadas cerca de las zonas de guerra, ya que los comandantes buscan intimidarlos para que se unan al conflicto bélico.
Miles de soldados rusos desisten y llaman a línea directa de Ucrania "Quiero vivir"
Existe una línea directa personalizada llamada "Quiero vivir", afirmó el gobierno de Ucrania. Con ella buscan que los soldados que quieren desistir de la guerra puedan ser salvados del conflicto bélico a cambio de que no participen con las fuerzas rusas. Se dice que el centro de llamadas se trasladó recientemente a un lugar secreto para evitar la interferencia de Moscú. Entre el 15 de septiembre del 2022, cuando se lanzó la línea directa, y el 20 de enero de este año se han registrado 6 mil 543 militares rusos que cedieron de la línea de frente. Cabe destacar que la línea directa, a cargo de 10 operadores, y se estableció tras el anuncio de Vladimir Putin de una movilización de 300 mil 000 civiles con experiencia militar previa para unirse al esfuerzo de guerra ruso.
El servicio cuenta con personal las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y ha sido catalogado por el gobierno ruso como “totalmente exitoso”. Se reportaron entre 50 y 100 llamadas, aunado a mensajes de textos al canal de Telegram del servicio que se reciben todos los días, aunque el personal militar ruso ya está investigado los datos personales y el número de la línea de ayuda, informó The Guardian.
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