Una estudiante, de 21 años, de la Universidad de Otago sufrió terribles lesiones luego de caer desde 11 metros de altura, mientras escalaba montañas en Estados Unidos. Sus familiares comentaron a medios de comunicación que "es más fácil contar los huesos que no se rompió en el accidente".
La joven fue identificada como Anna Parsons, originaria de Australia, y se encontraba escalando las montañas Runout Slab en Snake Dike en el Parque Nacional Yosemite, en California. Sin embargo, mientras la mujer realizaba dicha actividad resbaló y rodó por una pendiente empinada, golpeándose en repetidas ocasiones mientras caía.
Derivado del accidente, la estudiante universitaria se rompió casi todos los huesos del cuerpo y acumuló una factura hospitalaria de 1.2 millones de dólares, según declaraciones de sus familiares, quienes también detallaron que Anna perdió un pie por la caída.
La hermana de Anna, Jessica Ennor, dijo que la caída provocó que la joven se rompiera el cuello, la columna vertebral, la pelvis, las costillas, la muñeca, los pies y los dedos de los pies, y la dejó con lesiones internas, incluido un pulmón perforado.
"Su pie izquierdo estaba tan dañado que tuvo que ser amputado y la semana pasada se sometió a una cirugía reconstructiva mayor en el pie derecho", detalló.
Jessica comentó que lo único que su hermana no se rompió fueron los brazos, los fémures y la cabeza, "lo cual es increíble”, según su testimonio. “El dinero es algo por lo que no nos gusta estresarnos, pero las facturas médicas de Anna superan el millón de dólares”.
De acuerdo con Jessica, su hermana viajó al Parque Nacional Yosemite para poder escalar las montañas. “Ella ha escalado durante un par de años, pero no diría que tiene experiencia", añadió. "Se suponía que Runout Slab era un ascenso fácil”.
Tras el accidente Anna dijo en un mensaje, en redes sociales, que estaba agradecida con el rápido y eficiente equipo de rescate que la sacó de la ladera de la montaña y la llevó directamente al hospital en helicóptero.
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