MADRID. En España se reavivó el debate sobre la obligatoriedad de llevar mascarilla en el transporte público. Los expertos en salud se encuentran divididos ante una medida que parece inminente. Incluso, los ciudadanos mantienen posturas contrarias.
Una reciente encuesta reflejó que 48.5% de españoles "se siente de poco a nada seguro sin cubrebocas", frente a 48.4% que "está muy o bastante seguro sin mascarilla".
El gobierno levantó la obligación de portar tapabocas el pasado 19 de abril, después de dos años de su imposición. Sin embargo, el uso de la mascarilla se mantiene en varios contextos: hospitales, centros de salud, residencias de mayores, farmacias, transporte aéreo, ferroviario, autobuses, buques, Metro y camiones urbanos.
Con 90% de la población vacunada, expertos consideran que es inútil seguir llevando tapabocas en el Metro y camiones urbanos. No así en otros ámbitos, como centros sanitarios, asilos y transporte aéreo, donde portarla crea una barrera eficaz para evitar contagios.
El epidemiólogo Fernando Simón, exresponsable de Emergencias Sanitarias, manifestó recientemente en un congreso, "que no ve lógico que se siga usando el tapabocas en el transporte público, ya que hay muchos sitios como fiestas tradicionales, conciertos e incluso los bares, donde hay exposición y no se lleva mascarilla".
Esta opinión contrasta con la del presidente de la Sociedad Española de Médicos de Familia, Lorenzo Armenteros, que considera "que el transporte público es un absoluto foco de posibles contagios. Debemos pensar lo que hemos vivido y cómo debemos evitarlo para no volver ahí", aseveró.
Con el inicio del curso escolar en septiembre, los alumnos ya no llevan mascarilla, una medida que aplauden, al igual que muchos docentes que detectaron efectos negativos en la comunicación.
En el entorno laboral, se deja a las empresas la libertad para decidir si sus empleados deben usar mascarilla, tras una evaluación de riesgos. La mayoría de las compañías han optado por el trabajo híbrido (una combinación entre laborar desde casa y la oficina), con buenos resultados.
El levantamiento de las restricciones del uso del cubrebocas ha ido acompañado por un criterio de recomendaciones para que en determinados casos se continúe utilizándolos. Hablamos de personas mayores de 60 años, inmunodeprimidos, vulnerables y embarazadas. Asimismo, es recomendable llevar el tapabocas en cines, teatros, supermercados, centros comerciales y clubes nocturnos. Pero es muy raro ver a la gente con mascarilla desde el día que dejó de ser obligatoria. Para la mayoría hay una sensación de normalidad.
Ahora el gobierno tiene que evaluar este otoño las opiniones de los expertos para decidir si llegó el momento de eliminar las restricciones en el transporte público.