Vacunas, prevención de pandemias, amenazas rusas y chinas, así como una urgencia climática fueron las principales conclusiones de la cumbre del G7, en Reino Unido.
El G7 prometió aportar "más de mil millones de dosis" para países pobres de aquí al fin de 2022, según el premier Boris Johnson, ya sea directamente regaladas (870 millones de dosis) o por financiamiento.
Por otro lado, las grandes potencias buscan presionar para avanzar sobre el tema del clima, sin embargo, no dieron objetivos precisos.
Apoyan la idea de una "revolución verde" creadora de empleos, que permitiría limitar el calentamiento a 1.5 grados, umbral más allá del cual los científicos consideran que el cambio climático será incontrolable.
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Finalmente, las naciones quieren ayudar a los países en desarrollo, ya sea sobre la salud, la seguridad, lo digital y la igualdad.
Prometen proposiciones concretas para el otoño boreal sobre un proyecto visto como respuesta a la influencia de China en países pobres, a través del plan de inversión "Nuevas rutas de la seda".
AFP
DZA