Portar traje de cuerpo entero es la forma en la que las gimnastas comenzaron a protestar contra la sexualización de las deportistas en las competencias. Sarah Voss lo hizo durante su participación en el Campeonato Europeo de Gimnasia Artística, que se desarrolla desde el miércoles hasta el domingo en Basilea, Suiza.
Hasta ahora, las mujeres sólo se habían cubierto las piernas en esta competencia internacional por razones religiosas. Voss, de Alemania, dijo estar orgullosa de su decisión.
La Federación Alemana de Gimnasia respaldó a su integrante y mencionó que sus gimnastas se oponen a la "sexualización en la gimnasia", y agregó que el tema se ha vuelto aún más importante para prevenir el abuso sexual.
"Todas las mujeres queremos sentirnos bien en nuestra piel. En la gimnasia se hace cada vez más difícil a medida que una deja el cuerpo de niña. De pequeña, yo no veía los atuendos ajustados como algo tan importante. Pero cuando comenzó la pubertad, cuando llegó mi período, comencé a sentirme cada vez más incómoda", aseguró Voss.
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No rompe ninguna regla
Según las reglas de la Federación Internacional de Gimnasia (FIG), los competidores pueden usar una "malla de una pieza que cubra las piernas, desde la cadera al tobillo", siempre que sea de diseño elegante.
La Federación de Gimnasia de los Países Bajos también elogió la medida. Un portavoz informó a la emisora pública neerlandesa NOS que los jueces solían quitar puntos cuando un competidor intentaba hacer que su malla se sintiera más cómoda durante su presentación.
Voss aclaró que si bien ella nunca había sufrido abuso, ella y sus colegas eran modelos a seguir para los atletas más jóvenes y querían alentar a todas a que se defendieran. Esperan que cada vez más compañeras se sumen y esta tendencia se replique en los Juegos Olímpicos de Tokio, Japón.
msb