Después de tres días en que las autoridades y ciudadanos argentinos hicieron todo lo posible por encontrar a Maia, la pequeña de 7 años fue encontrada ilesa. Había sido secuestrada el lunes, por Carlos Alberto Savanz de 35 años, que ahora está detenido y será juzgado por el delito de secuestro.
A Maia y a sus secuestrador los encontraron dormidos en las calles de Liners, en Buenos Aires, gracias a una llamada anónima que alertó a la policía, tras haber reconocido a la menor y a Savanz. Las imágenes que fueron publicadas en redes sociales fueron clave para que se tuviera un final feliz.
En el momento en el que los agentes llegaron al lugar indicado, Maia estaba durmiendo en la cesta de la bicicleta en la que el captor se la había llevado. Por el momento no se ha dado a conocer la razón del secuestro, pero el hombre tiene antecedentes por abuso a otra menor.
FOTO: Twitter
Se ganó la confianza de Maia
Carlos Alberto Savanz convenció a Estela, la madre de Maia, para que la niña se fuera con él. El secuestrador le hizo una promesa de que le iba a regalar una bicicleta. Lo que la madre no se imaginaba es que pensaba secuestrarla. Luego de varias horas en que la niña no regresaba interpuso la denuncia.
Savanz era conocido de la mujer, pero al parecer no tenían una relación de amistad, simplemente se conocían desde hace un mes e intentó ganarse la confianza de la madre y la niña. “Yo le permití ir a cambiar la bicicleta”, confesó con angustia su madre.
Maia vive en la calle junto a su madre y a sus hermanos, situación que fomenta una mayor desprotección tanto de ella como de todos los niños que se encuentran en circunstancias similares. Además, las autoridades reconocen su preocupación por la vulnerabilidad que viven los niños en situación de calle, unos 950 en Buenos Aires.
gka