Científicos franceses han relacionado los efectos permanentes de Covid-19 con daños a la vista de los pacientes. Un nuevo estudio sugiere que los contagios más graves, pueden tener como consecuencia irreversible un daño a la vista de quienes lo padecieron.
Los investigadores revisaron las imágenes de resonancia magnética de 129 pacientes que se presentaron con Covid-19 grave, es decir, que estuvieron en la Unidad de Cuidados Intensivos, en Francia entre el 4 de marzo y el 1 de mayo de 2020.
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Las pruebas de estas resonancias mostraron que nueve de los 129 pacientes tenían una o varias irregularidades en la parte posterior de los ojos. Estas pueden ser un posible daño o bloqueo de los vasos sanguíneos, pequeñas hemorragias en el ojo o interrupción de las fibras nerviosas. Incluso en algunos casos, con consecuencias irreversibles para el resto de sus vidas.
Entre todos los 129 estudios, sólo uno de ellos pudo salir con normalidad del contagio y de los cuidados intensivos. Esto, lógicamente contempla sólo a las personas de Francia y en circunstancias muy particulares.
FOTO: Archivo
Las limitantes del estudio
Existen algunas limitantes en el estudio de los científicos franceses. Por ejemplo, debido a la falta de un “examen oftalmológico sistemático” de los pacientes en la UCI, los investigadores estaban limitados por los datos y no podían confirmar una relación entre sus datos y los cambios en la visión.
Los investigadores creen que los daños pueden ser causados por la coagulación sanguínea generalizada en los vasos pequeños y la interrupción de una enzima que protege el ojo del daño. Entre otras de las cosas que sugieren, también está el que exista una mayor presión en los ojos, causada por colocar a los pacientes de la unidad, boca abajo. Esto se hace para que puedan recibir ventilación mecánica.
Aunque reconocieron que son avances importantes en la investigación, también aseguraron que se necesitan más estudios para determinar exactamente qué está causando el daño en los ojos de pacientes, cuál es el daño que se da y si hay alguna posibilidad de contrarrestarlo.
Nuestros datos apoyan la necesidad de detección y seguimiento de los pacientes para proporcionar el tratamiento adecuado y mejorar el manejo de las manifestaciones oftalmológicas potencialmente graves, dijeron los autores del estudio.
gka