Una tormenta que azotó la costa del Atlántico de Estados Unidos con ráfagas de viento de intensidad de huracán dejó a más de medio millón de viviendas y negocios sin electricidad en Nueva Inglaterra y obligó al cierre de puentes y escuelas. Hay dos muertos.
Trabajadores de servicios públicos trabajaban para restaurar la electricidad una vez que los vientos y la lluvia, que se extendieron hasta Nueva Escocia, Canadá, disminuyeron durante el día.
Restaurar el servicio en las áreas más afectadas en el sureste de Massachusetts tomará días, dijo la compañía Eversource al periódico Cape Cod Times.
La Agencia de Manejo de Emergencias reportó unos 600 mil apagones, luego que los vientos derribaron ramas de árboles sobre los cables del tendido eléctrico.
Las compañías de servicio público reportaron unos 90 mil usuarios sin servicio en Rhode Island, 17 mil en Maine, 15 mil en Connecticut y 6 mil en Nueva Hampshire.
Las autoridades recomendaron abstenerse de viajar.
AP y AFP
MAAZ