A casi dos meses que los talibanes tomaran el control de Afganistán y prometieran respetar los derechos de las mujeres, fue dada a conocer una reveladora entrevista con una entrenadora de voleibol que confesó que a inicios de octubre fue asesinada la joven promesa del deporte, Mahjubin Hakimi.
La joven de 18 años formaba parte del club juvenil de voleibol de la municipalidad de Kabul y era una de sus estrellas. Sin embargo, Suraya Afzali (nombre ficticio para proteger su identidad) dijo que la familia de la joven deportista no había dicho nada porque había sido amenazada, por lo que sólo ellos sabían cuándo había muerto.
Sin embargo hay un par de versiones en torno del fallecimiento de la joven promesa del voleibol, pues mientras la entrenadora afirma que fueron los talibanes quienes la mataron, decapitaron y presumieron fotos de su cabeza en redes sociales, otros aseguran que en realidad Mahjubin se suicidó.
Suraya Afzali dijo que tras el regreso de los talibanes a Afganistán, las atletas comenzaron a ser perseguidas y los integrantes del nuevo gobierno habrían cateado sus casas, por lo que la mayoría tuvo que huir o esconderse en ubicaciones secretas, ya que corren peligro de ser asesinadas y no cuentan todas con el apoyo de otros países u organizaciones para salir del país.
Es por ello que las deportistas temen convertirse en blanco de los talibanes tras darse a conocer el asesinato de Mahjubin Hakimi, pues eso significaría poner un freno a todos los deportes femeninos y, en general, a todas las actividades sociales, económicas y políticas en las que las mujeres solían participar antes del regreso de los talibanes.
No creen que los talibanes la hayan matado
Justo cuando se da a conocer que la joven deportista fue asesinada, en redes sociales comenzaron a circular fuertes fotografías de su supuesta cabeza cercenada, lo que vendría a reforzar la hipótesis de que los talibanes la decapitaron.
Sin embargo, muchos otros sostienen que la jugadora de voleibol no fue asesinada por el grupo extremista que controla Afganistán, sino por alguien más o bien, afirman que se suicidó ante las dificultades del entorno en su país y la imposibilidad de salir y pedir refugio en otro lado.
El medio local Amaj News informó que tras llevar a cabo una investigación sobre el caso, sus fuentes confirmaron que la atleta no fue decapitada por los talibanes, sino que más bien murió "misteriosamente" una semana antes de la caída de Kabul, es decir, que se habría suicidado el pasado 13 de agosto.
Con información de The Independent Persian
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