Nos consideremos personas que siempre están al último grito de la moda o no, lo que es una realidad es que todos necesitamos de la ropa que nos haga sentir cómodos y con el estilo adecuado, ya sea para ir a la escuela, el trabajo, una salida con amigos o una tarde en el parque con nuestros hijos o mascotas. Para nadie es secreto que cada prenda está pensada para una ocasión en especial y eso incluye el clima, pues en los días más calurosos no usamos un gran abrigo que resulte poco útil.
Lo mismo ocurre cuando llega la temporada de lluvias del verano, pues en este momento del año nos vemos obligados a pensar en las prendas del clóset que nos mantengan lo más cubiertos posible, pero que al mismo tiempo no resulten demasiado abrigadoras, ya que por las tardes el calor también se puede hacer presente. Aunque los impermeables son indispensables en este momento del año, no deberían ser nuestros únicos acompañantes ni mucho menos a los que más cuidemos, porque aunque poco se habla de ello la lluvia también puede dañar la mezclilla de los jeans, el algodón de las blusas y ni hablar de nuestro calzado.
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¿Qué pasa si le cae agua lluvia a la ropa?
Aunque para muchos la lluvia es sólo agua, se debe de recordar que puede traer consigo desde la contaminación, hasta otro tipo de sustancias que terminen por afectar los tejidos de nuestra ropa. Es por ello que hoy te compartimos algunos secretos que si sigues al pie de la letra, lograrán que tus prendas favoritas y las de tu familia luzcan como nuevas por más tiempo y no resulten con algún daño a causa de la lluvia.
Entre algunos de los daños comunes que podemos encontrar son manchas, pero también es posible que dependiendo de los materiales de nuestra ropa se encuentren problemas como que se encojan, como es el caso de la lana, e incluso que pierdan su color o que queden despigmentados sólo en ciertas zonas, ¡y ni hablar de cuando una prenda desprende tinta y termina manchando otras piezas!
Tips para cuidar tu ropa cuando llueve
Cecilia Ollero, Country Manager de GoTrendier México, explica que durante las lluvias típicas de la temporada es fundamental "la elección estratégica de materiales y colores", ya que esto "puede marcar la diferencia entre lucir impecable o arruinar un gran look". Si bien existen muchos tips con los cuales alargar el tiempo de vida útil de nuestra ropa, la experta recomienda: "optar por prendas con tecnología waterproof o Gore Tex y en colores trending como el rojo radiante, azul bebé, tonalidades neutras como el beige y el café, verde lima y rosa pastel no solo garantizan protección contra el agua, sino que también un outfit y estilo ganador".
Por supuesto, no son los únicos consejos a seguir y es por ello que nos compartió los cinco secretos mejor guardados para evitar que nuestra ropa y calzado resulten dañados o arruinados por completo en esta época del año donde hay más lluvias.
- Ser precavida vale por dos: antes de salir de casa, verifica el pronóstico del tiempo para estar preparada. Si se esperan lluvias, opta por prendas impermeables o que sean menos propensas a dañarse con el agua. Chaquetas y abrigos con tratamiento repelente al agua son ideales para protegerse sin sacrificar el estilo, incluso podrías usar algún spray comercial que de una capa anti agua a tus prendas favoritas. Ten en cuenta que todas las prendas que cuenten con alguna de las tecnologías: waterproof (resistente al agua) o Gore Tex (impermeable y transpirable) serán tus aliadas para lucir bien y estar preparada para cualquier chubasco.
- Protege tus calzado: los zapatos son vulnerables ante las lluvias intensas. Para evitar que se dañen, utiliza impermeabilizantes específicos para calzado. El agua puede hacer que las cerdas de la gamuza se debiliten o adelgacen y que la piel se quiebre de forma irreversible, lo que ocasionará que tu calzado se vea mucho más viejo y desgastado de lo que realmente es. La vieja confiable en estos casos son las típicas Wellington Boots que puedes combinar con prendas casuales y también con opciones más formales.
- En caso de emergencia, las capas extra serán tu salvación: en caso de que la lluvia te tome por sorpresa, llevar ropa que puedas poner y quitar fácilmente te permitirá proteger tus demás prendas. Un poncho o una capa ligera son opciones prácticas que te ayudarán a mantener tus piezas principales secas. No obstante, recuerda seguir las instrucciones de lavado y secado de estas para evitar su desgaste.
- Secado adecuado: después de un día lluvioso, es crucial secar adecuadamente las prendas mojadas. Evita dejarlas en bolsas cerradas por mucho tiempo o guardarlas en tu closet inmediatamente, ya que esto puede propiciar la aparición de moho y bacterias que pueden crecer dentro de las fibras de la tela, resultando en manchas y daños que pueden ser permanentes. Por ello, colócalas en un lugar bien ventilado y, si es posible, al sol para que se sequen completamente. Este proceso no solo ayuda a conservar las prendas en buen estado, sino que también contribuye a mantener un ambiente libre de humedad en tu hogar.
- Limpieza inmediata: si alguna prenda se moja, trata de limpiarla lo antes posible. Elimina las manchas de barro o suciedad con un paño húmedo antes de que se sequen y se fijen en el tejido. Luego, lávala según las indicaciones de cuidado para evitar daños permanentes.