En el cuidado de las plantas hay muchos consejos que seguir, pues no solo hay que acatar las recomendaciones de cada especie, sino también buscar fertilizantes orgánicos, abono y compost, que beneficie a la vegetación. Incluso es indispensable poner atención en el tipo de tierra que se elige para colocar en las macetas o plantar en el jardín.
En el mundo de la jardinería hay muchos tipos de tierra, sin embargo, la más usada es la negra. La tierra negra es muy popular debido a que tiene muchos beneficios para el crecimiento de las plantas y las flores, por tal motivo, es buena idea que los que van empezando sus cultivos en casa, sepan por qué es una de las mejores y para qué sirve.
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¿Cuáles son los beneficios de la tierra negra?
De acuerdo a los expertos en jardinería, la tierra negra está compuesta de descomposición de la materia orgánica, como son los restos de animales o restos de hojas. Este elemento se encarga de estimular el crecimiento de las plantas debido a que absorbe los nutrientes con mucha facilidad.
Asimismo, la tierra negra ayuda a la circulación entre las raíces de las plantas, lo que permite que duren por mucho más tiempo. De igual forma, aporta una oxigenación de la tierra que deja que pequeños insectos se desarrollen, apoyando a las plantas a crecer, mientras que también permite que se drene el agua y que tenga mayor fertilidad el suelo.
¿Cómo utilizar la tierra negra en las macetas o jardín?
La tierra negra se puede utilizar como abono, en macetas o en el patio, también se usa como relleno para el jardín, y si estás pensando en comenzar a plantar tus propios alimentos, la mejor opción es este tipo, debido a que como se había mencionado, tiene propiedades para fomentar la fertilidad del suelo.