Hoy, 29 de septiembre, se celebra el 'Día Mundial del Corazón', y tiene como objetivo informar a la ciudadanía sobre la necesidad de desarrollar hábitos de vida saludables como medida de prevención de las enfermedades cardíacas, dado que la enfermedad cardiovascular (ECV) es la principal causa de muerte en el mundo, según estudios universales.
En el 'Día mundial del corazón', el segundo órgano principal que nos mantiene con vida, haremos énfasis en corregir malos hábitos y fomentar un estilo de vida saludable. ¿Y qué tiene que ver la cerveza y la sidra? Resultaría irónico pensar que una de las bebidas que más se consume en el mundo -y que provoca enfermedades como el alcoholismo-, también pueda ser una receta para el corazón.
Un ataque cardíaco, accidente cerebrovascular e insuficiencia cardíaca matan a 20,5 millones de personas cada año. Por lo tanto, es necesario corregir malos hábitos y fomentar un estilo de vida saludable como prioridad fundamental para cuidar de la salud cardiovascular. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que la mayoría de las enfermedades cardiovasculares se pueden prevenirse actuando sobre factores de riesgo nocivos como el consumo de tabaco o una mala alimentación.
La dieta mediterránea
Diversos estudios sugieren que la llamada 'dieta mediterránea', en la que se incluye la ingesta moderada de bebidas fermentadas, podría ayudar a disminuir los factores tradicionales de riesgo cardiovascular y tener efectos protectores directos sobre los vasos sanguíneos.
Las bebidas fermentadas, como son la cerveza, el vino o la sidra en un consumo moderado en adultos sanos, pueden ayudar a disminuir los factores tradicionales de riesgo cardiovascular y tener efectos protectores directos sobre los vasos sanguíneos.
¿La cerveza engorda?
Unos estudios publicados en European Journal of Epidemiology aseguran que quienes consumen cerveza diaria y moderadamente tienen un 42% menos de riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca. ¿A qué se debe esto? A los antioxidantes naturales conocidos como polifenoles, los mismos que funcionan como protección de esos males.
Otros beneficios que se han identificado concluyen de que la cerveza, ingerida moderadamente, no engorda. Moderación definida como dos o tres cervezas al día en hombres y dos en mujeres. Lo que es un aporte calórico de 100 Kcal por 100 ml y de 45 kcal si no tiene alcohol.
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