Tener dolor de cabeza es de los padecimientos más molestos que alguien puede sufrir. Punzadas constantes o un dolor taladrante e intenso que no para. De acuerdo con Mayo Clinic -entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación-, los dolores de cabeza pueden afectar uno o ambos lados de la misma, aparecer puntualmente en una ubicación determinada, extenderse desde un punto hacia el resto de la cabeza o ejercer presión.
¿Por qué me duele la cabeza?
Según la prestigiosa red de hospitales estadounidense, la mayoría de los dolores de cabeza no son el resultado de una enfermedad grave, pero algunos pueden deberse a una enfermedad que ponga en riesgo la vida y que requiera atención de urgencia. Cabe puntualizar que hay que acudir con tu doctor u otro profesional de atención médica para obtener un diagnóstico preciso. Los dolores de cabeza generalmente se clasifican según la causa.
¿Cuáles son las causas del dolor de cabeza?
Dolores primarios
Los primeros son los dolores de cabeza primarios, los cuales se deben a hiperactividad o a problemas con las estructuras de la cabeza sensibles al dolor. Un dolor de cabeza primario no es síntoma de una enfermedad oculta. Estos dolores de cabeza tienen características distintivas, como una duración inusual o un dolor asociado a una actividad determinada. Algunos dolores de cabeza primarios pueden ser desencadenados por factores relacionados con el estilo de vida:
- Consumir bebidas alcohólicas, en particular el vino tinto
- Alimentos, como las carnes procesadas
- Falta de sueño
- Mala postura
- Saltarse comidas
- Estrés
Dolores secundarios
Por otro lado, se encuentran los dolores de cabeza secundarios, un síntoma de una enfermedad que puede activar los nervios sensibles al dolor de la cabeza. Según Mayo Clinic, existe una gran cantidad de afecciones de distinta gravedad que pueden causar dolores de cabeza secundarios. Las posibles causas de los dolores de cabeza secundarios incluyen las siguientes:
- Sinusitis
- Intoxicación con monóxido de carbono
- Conmoción
- COVID-19
- Deshidratación
- Problemas dentales
- Infección del oído
- Encefalitis (inflamación del cerebro)
- Arteritis de células gigantes (inflamación del revestimiento de las arterias)
- Glaucoma (glaucoma de ángulo cerrado agudo)
- Resacas
- Presión arterial alta (hipertensión)
- Gripe y otras enfermedades acompañadas de fiebre
- Medicamentos para tratar otros trastornos
- Meningitis
- Uso excesivo de analgésicos
- Los ataques de pánico y el trastorno de pánico
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