La lavadora es uno de los electrodomésticos favoritos de la familia; sin embargo, el gasto de agua que se utiliza depende directamente de la capacidad de carga que tenga la máquina, pues por lo general, a mayor capacidad, mayor gasto. Las lavadoras más habituales son las que tienen una capacidad entre 5 y 7 kilos, donde el consumo de cada una oscila entre los 30 litros hasta los 52 litros, y entre los 42 litros 62 litros de agua por lavado, respectivamente.
La crisis climática avanza a pasos agigantados sin retorno, organismos internacionales han urgido medidas para contrarrestar los efectos devastadores en el planeta; pequeñas acciones hacen el cambio, desde utilizar ropa de segunda mano para evitar que las prendas terminen en vertederos y contribuya a los gases de efecto invernadero, hasta aprovechar el agua de las lluvias para realizar las tareas domésticas y no gastar el vital líquido.
¿Cómo reutilizar el agua de la lavadora?
En ese sentido, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) creó el Programa de Manejo, Uso y Reúso del Agua (PUMAGUA), con el que busca mejorar la calidad del agua de la lavadora para que poder reutilizarla en distintas actividades del hogar. La máxima casa de estudios recomienda realizar un sencillo filtro, el cual permitirá mejorar las características físicas del agua, al igual que eliminar malos olores. Se necesitarán los siguientes materiales:
- Dos botellas de plástico del mismo diámetro
- Un trozo de malla mosquitera
- Algodón
- Arena
- Grava
- Carbón
- Tijeras o un cúter
- El agua de la lavadora
Paso a paso para aprovechar el agua de la lavadora
1. Realizar un corte inferior a uno de los recipientes. Al segundo, cortarlo por la parte superior; el primer bote servirá como recipiente del filtro, mientras que el segundo contendrá el agua filtrada.
2. Colocar los materiales del más fino al más grueso: agregar una capa de algodón, luego una de carbón, otra de arena, una capa de grava o piedra y, por último, un trozo de malla mosquitera. Cada una de las capas debe tener un grosor mínimo de 5 centímetros.
3. Antes de empezar a añadir los materiales, realizar una perforación en la tapa. También se necesitará un trozo de malla mosquitera del mismo tamaño que la tapa, a fin de que los materiales no se salgan del filtro.
4. Agregar una primera capa de algodón, la cual, va a ayudar a retener los sedimentos que puedan ser arrastrados por el agua y que no puedan caer en el recipiente.
5. Triturar el carbón, a fin de aumentar la superficie de contacto con el agua. Este elemento servirá para eliminar olores no deseados en el agua, así como mejorar su aspecto.
6. Será necesario generar una capa uniforme de los materiales, por lo que será clave compactarlos con la ayuda de un recipiente. Continúa agregando una capa de arena, la cual tendrás que compactar con ayuda de un recipiente. La última capa del centro va a ser de grava fina.
7. Para finalizar, coloca un trozo de malla mosquitera con la finalidad de retener el material suspendido en el agua.
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