Tener relaciones sexuales es una de las experiencias más placenteras que las personas podemos llegar a experimentar por todas las sensaciones que nuestros cuerpos experimentan gracias a la compañía de una pareja y, por supuesto, de la buena química que se crea en la cama; sin embargo, la sensibilidad no es la única que se ve involucrada, pues la liberación de sustancias en nuestro cerebro también ocasiona que cada encuentro sea un sube y baja de todo tipo de emociones. Y si bien la experiencia puede llevar al orgasmo y terminar con la relajación, también ocasiona bajadas importantes que lleven al llanto.
¿Alguna vez te has descubierto (o a tu pareja) llorando después de tener relaciones sexuales?, si la respuesta es sí no tienes nada de qué preocuparte pues ni tú o con quien tuviste sexo son los responsables, ni mucho menos se refiere a una falta de confianza o amor. La razón de todo esto es que aunque los encuentros sean consensuados, al terminar el cuerpo tiene que asimilar que de un momento a otro que la satisfacción que ocasionaron todo tipo de hormonas llegó a su fin y que por lo tanto los sentimientos de tristeza o melancolía se pueden hacer presentes.
Por supuesto, todo esto tiene una explicación más detallada y que la comunidad científica ha nombrado como disforia postcoital, es decir, la razón por la que tanto mujeres como hombres podemos llegar a llorar después del sexo. Así que no dejes de leer si quieres saber qué es lo que ocurre exactamente luego de haber disfrutado como nunca en la cama e incluso tras haber alcanzado el orgasmo.
¿Qué es la disforia postcoital?, ocasiona que sientas una tristeza "inexplicable"
De acuerdo con un estudio publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina, esta condición se caracteriza por "sentimientos inexplicables de llanto, tristeza y/o irritabilidad" y aunque para muchos simplemente ocurre tras haber alcanzado el punto máximo del placer, existen algunos síntomas que acompañan a este proceso y que son los que causan que después de tener relaciones sexuales el ambiente se pueda poner tenso, pero también mejorar la relación en pareja.
Aunque aún hace falta mucha investigación al respeto, se cree que se trata de algo normal y natural del organismo, esto debido a los altos niveles de sustancias químicas que se generan durante las relaciones sexuales y que nos ayudan a sentir el placer y la felicidad, como es el caso de la dopamina, las endorfinas, la prolactina y la oxitocina, pero que luego de un rato regresan a sus niveles usuales.
También se sabe que los síntomas pueden variar entre un sexo y otro, de ahí que las mujeres sientan cambios de humor y tristeza; mientras que la mayoría de los hombres estudiados presentaron otras características, peo también se relacionan con lo anterior con sentimientos de infelicidad y poca energía. Para llegar a esto se estudiaron a 223 mujeres y 76 hombres con una encuesta en línea que permitió conocer más sobre este problema que nos lleva a las lágrimas incluso si no hubo una penetración, ya que las personas que sólo recurrieron a la masturbación también experimentan esta etapa.
- El 94.3% afirmó haberlo experimentado desde que iniciaron su vida sexual
- El 73.5% presentó síntomas poscoitales después de la relación sexual
- El 46.6% lo sintió después de la masturbación
- El 33.9% solo experimentó los síntomas después del orgasmo
Aunque descubrir por qué lloramos después de tener relaciones sexuales es una de las metas de la comunidad científica, la razón que lo detona no está completamente clara y según otro estudio de 2019 en el que se encuestó a mil 208 hombres, para este sexo el panorama puede llegar a ser todavía más complejo e incluso se ha asociado con "angustia psicológica actual, abuso sexual infantil, y varias disfunciones sexuales".
Ahora que ya sabes qué es lo que ocurre en tu cuerpo después de tener relaciones sexuales, no te sientas mal por no seguir disfrutando el placer y la relajación que también suelen dejar el orgasmo, pues los sentimientos de tristeza y el llanto también son emociones válidas que te pueden ocurrir tanto a ti como a tu pareja. Por otro lado, acompañar a tu amada o amado en esta etapa puede ayudarlos a mejorar su vínculo.
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