- Los buñuelos son un delicioso postre tradicional mexicano que se disfruta durante la época decembrina. Es muy común que abunden puestos en la calle vendiendo este crujiente antojo, acompañado de toppings como mermelada, Nutella y hasta Lechera.
- Te compartimos una receta de buñuelos mexicanos sin incluir azúcar para hacerlos más saludables y así puedas disfrutar sin remordimientos de este rico postre durante las fiestas navideñas.
¿Cómo hacer buñuelos con piloncillo para Navidad?
Ingredientes para la masa:
- 3 tazas de Harina
- Polvo para hornear
- Sal
- 4 Huevos
- 1 barra de Mantequilla
- 1 taza de Agua tibia
- Esencia de vainilla
- Aceite vegetal
- Stevia líquida
Ingredientes para el jarabe de piloncillo:
- 2 tazas de Agua
- Canela entera
- 3 Guayabas
- Anís
- 1 Cáscara de naranja
- 1 piloncillo
Modo de preparación:
Hagamos el jarabe de piloncillo:
En una olla pequeña calienta a fuego medio la taza de agua y el piloncillo y remueve hasta que éste se disuelva y quede una consistencia acaramelada. Añade las guayabas, la cáscara de naranja y el anís y sigue revolviendo mientras deja que hierva por 5 minutos, a fuego bajo. Una vez listo, apartas.
Hagamos la masa:
En un bowl grande mezcla la harina, el polvo para hornear, una pizca de sal y unas gotas de Stevia líquida. Haz un hueco en el centro y agrega el huevo, la mantequilla derretida y un chorrito de vainilla. Revuelve para que los ingredientes se integren bien y ve agregando agua poco a poco mientras amasas hasta que tenga una consistencia suave, lisa y manejable.
Tapa la masa para los buñuelos y déjala reposar por media hora.
En un sartén vas a calentar 3 dedos de aceite vegetal a fuego medio.
Divide la masa en 10 bolitas y estíralas con un rodillo sobre la mesa previamente limpia y enharinada para evitar que se te peguen. Extiende con el rodillo hasta que queden redondos, lisos y del tamaño deseado. Los dejas reposar por veinte minutos para que la masa se endurezca un poco a temperatura ambiente y sea más fácil freírlos.
Una vez reposados, los vas a pasar por el aceite caliente uno por uno hasta que queden bien freídos de los dos lados y vas apartando. Los cubres con una servilleta de papel para quitar el exceso de aceite.
Cuando estén listos, espolvoreas canela en polvo y los bañas con el jarabe de piloncillo para un extra sabor. ¡Disfruta!