Tener una cejas rellenas y definidas, sin cambiar su forma o color, es vital para las mujeres que buscan mejorar la estética de su rostro. Vale mencionar que tiempo atrás, las mujeres optaban por lucirlas finas. Sin embargo, en la actualidad, muchas de ellas prefieren mostrarlas frondosas y con una forma perfecta, ya que aportan un aspecto más juvenil al rostro.
En la actualidad, existen muchos tratamientos para lucir unas cejas perfectas. El más popular es el maquillaje semipermanente para cejas "microblading" que ofrece la posibilidad de añadir más densidad, modificar su diseño o crear una ceja desde cero. Te contamos en qué consiste esta técnica que te hará presumir de un rostro más joven.
¿En qué consiste la técnica del microblaing?
El microblading es una tratamiento estético que en el que se realiza un tatuaje semipermanente en las cejas. Es decir, se inyecta color en la capa más superficial de las mismas. Su diseño es pelo a pelo, -líneas finas-, lo cual aporta ese factor natural que nadie percibirá. Es un tratamiento ideal para personas con cejas poco pobladas o que las han ido perdiendo con el paso de los años, o como consecuencia de alguna enfermedad.
Lo primero que hará el profesional, antes de comenzar con la técnica de microblading, es tomar una serie de mediciones de las cejas, para definir el diseño más favorecedor. Para ello tendrá en cuenta la forma de la cara y sus rasgos, además de la forma natural de esta parte de tu rostro. Posteriormente, se realizará una simulación con lápiz para que puedas ver cómo será el resultado final. Es importante hacer un retoque a las 4-6 semanas para completar el proceso y puede durar desde seis meses hasta un año o más, según el tipo de piel.
Las cejas lo son todo en un rostro y embellecen muchísimo. No solo se hace para combatir la falta de densidad del paso del tiempo o por exceso de depilación. Lo que persiguen las mujeres es también conseguir la forma perfecta y que mejor enmarque cada mirada, con la simetría perfecta.