Los perfumes cumplen un rol esencial en la vida de cualquier mujer, en el marco del ritual de belleza. Es que las fragancias no solo tendrán como principal función generar buen aroma, ya que también será nuestra carta de presentación, definirá la personalidad que llevamos y nos acompañarán todo el día. Sin embargo, para que se cumplan nuestros deseos, es vital tomar algunos recaudos, como por ejemplo no dejar los frascos al sol.
Después de una larga jornada de trabajo, lograr que nuestros perfumes se mantengan intactos y que nuestras fragancias nos duren todo el día es un sueño, más ahora en verano, donde el calor podría atentar contra nuestra higiene. Por lo tanto, además de saber qué fragancia comprar, es necesario tomar algunos cuidados específicos.
Es que los frascos de perfumes suelen ser tan bonitos que dan ganas de colocarlos como decoración en un estante o en una cómoda. Sin embargo, eso puede llevar a que pierdan más rápido la fragancia, por lo que su efecto será menos duradero. Por lo tanto, especialistas afirman que las colonias no tendrían que estar expuestas a la luz ni a las altas temperaturas, por lo que colocarlas donde les dé el sol será una pésima decisión.
En consecuencia, podremos perder la intensidad de nuestros perfumes, estropeándose por completo. Y ante esta situación, especialistas en la materia sugieren conservarlos en lugares oscuros y a una temperatura ambiente normal. De esta forma, lograremos que la duración de la fragancia (que es de 6 meses), pueda extenderse más de la cuenta.
Y para saber si el sol o la luz repercutieron en el estado de los perfumes, la mujer deberá observar el color del líquido y comprobar también si se volvió más espeso. Además, otra señal de que ha llegado al final de su vida útil es si la tapa está dura o si la fragancia se percibe algo más ácida o resinosa. En esos casos, más vale deshacerse del producto.