Los triglicéridos son los responsables de almacenar las calorías no utilizadas y proporcionar energía al cuerpo, aunque si sus niveles son altos pueden endurecer las arterias o engrosar las paredes arteriales, razón por la que mantenerlos en un rango saludable es importante. En consecuencia, especialistas explicaron cómo el omega 3 ayuda a disminuir sus niveles, logrando así evitar sufrir problemas de salud tales como un accidente cerebrovascular, un ataque cardíaco e inflamación en el páncreas.
Además, siguiendo esta línea, los triglicéridos altos representan un signo de otras afecciones que aumentan el riesgo de sufrir enfermedad cardíaca, obesidad y el síndrome metabólico, al mismo tiempo que presenta grasa alrededor de la cintura, hipertensión arterial, hiperglucemia y niveles anormales de colesterol, por lo tanto utilizar omega 3 será fundamental para no padecer estos problemas de salud.
En primer lugar es menester saber cuáles son los parámetros habituales de triglicéridos para saber si debemos poner énfasis en el consumo de omega 3. Normal: menos de 150 miligramos por decilitro (mg/dl), o menos de 1,7 milimoles por litro (mmol/l). Límite: 150 a 199 mg/dl (1,8 a 2,2 mmol/l). Alto: 200 a 499 mg/dl (2,3 a 5,6 mmol/L). Mientras que muy alto: 500 mg/dl o más (5.7 mmol/l o más).
En consecuencia, teniendo en cuenta estos valores, especialistas aconsejan comer al menos dos raciones semanales de omega 3, que lo podemos encontrar fácilmente en pescados como el salmón, el atún blanco, la trucha, las sardinas y el salmón. Además, en otros alimentos que podemos encontrar este nutriente que beneficia a la salud es en nueces y semillas como de linaza, de chía y nueces negras; en aceites de plantas como de la linaza, aceite de soja (soya) y aceite de canola o en alimentos fortificados como ciertas marcas de huevos, yogurt, jugos, leche, bebidas de soja y fórmula infantil.
En este contexto, para reducir los niveles de triglicéridos elevados será fundamental consumir los alimentos mencionados anteriormente ya que son ricos en omega 3 y también en otros nutrientes, beneficiando a la salud desde distintos panoramas. Aunque la ingesta debe ser guiada por profesionales, evitando así efectos secundarios.