El cáncer de intestino es uno de los tumores que menos se presenta en la población y que cada vez que lo hace se debe a una práctica en dietas ricas en grasas, también por la enfermedad de Crohn y, en otros casos, debido a antecedentes de pólipos en el colon. Esta enfermedad puede ser mortal si no es detectada a tiempo, por lo tanto es fundamental prestar atención a las 3 señales claves que vinculan a las deposiciones y heces.
Lograr un diagnóstico temprano del cáncer de intestino será crucial para salvar la vida del enfermo, es por eso que si los síntomas duran más de tres semanas, la persona afectada deberá acudir de inmediato al médico. Por lo tanto, conocer el estado de las heces y deposiciones será el eje en la detección de este tipo de tumor.
El cambio de consistencias de las deposiciones constituye una alarma de cáncer de intestino. En consecuencia, la persona deberá acudir al médico en caso de que note cómo cambian las formas en las que expulsa las heces, siempre y cuando no haya consumido alimentos en mal estado o este síntoma sea reciente y no dure más de 21 días.
La segunda señal que alertará la presencia de cáncer de intestino es el sangrado al momento de ir al baño. Este síntoma se presentará en las heces, por lo tanto habrá que revisar el color de las mismas, teniendo en cuenta que el color rojizo también puede ser por alimentos que tiñen tales como la remolacha. Además se deberá intentar reconocer el sangrado, ya que también puede ser por la presencia de hemorroides.
Finalmente, los síntomas del cáncer de intestino incluyen la necesidad de ir al baño con frecuencia, de forma inusual. Por lo tanto, cuando la persona siente necesidad de despedir sus heces continuamente, deberá consultar con su médico la razón por la cual está atravesando dicho cuadro. Otro de los síntomas frecuentes, dentro de esta línea es no vaciar por completo los intestinos después de hacer sus deposiciones.