Una de las formas más comunes de entrenar y que construye muchos mitos alrededor, es sin duda el ejercicio cardiovascular o mejor conocido como Cardio, pero lo cierto es que no siempre es recomendable este ejercicio o más bien no en todas las situaciones.
El ejercicio de cardio es comúnmente ocupado para lograr la meta de bajar de peso, ello con la idea de que mientras sudamos se quema la grasa acumulada en el cuerpo, principalmente en el área abdominal, pero lo cierto.
Lo cierto es que el entrenamiento de cardio va mucho más allá de eso, pues realizarlo dependerá de la manera en que entrenamos, el objetivo hacia nuestro cuerpo y por supuesto, la alimentación.
¿Cómo hacer cardio?
El ejercicio cardiovascular tiene por objeto mejorar nuestro rendimiento físico, el cual, si o si debe ir a acompañado de ejercicio anaeróbico, como el ejercicio de pesas.
El cardio te ayuda a controlar mejor tu respiración, así como retrasar tu fatiga muscular, pues mediante el gran bombeo de sangre en el cuerpo, se logra una mayor oxigenación.
Ahora bien, muchas personas comienzan sus rutinas de entrenamiento diarias realizando cardio, ya sea en una caminadora, elíptica o bicicleta, lo cual está bien y mal a la vez, pues estas sesiones de entrenamiento suelen durar hasta una hora, lo cual no es correcto en todos los casos.
Indicaciones para hacer cardio
Las sesiones de cardio se recomiendan hacer entre 20 a 25 minutos cuando mucho y no siempre deben ocuparse como fase de calentamiento, pues si trabajaremos pecho o espalda, de nada sirve haber caminado varios kilómetros en la caminadora o haber subido escalones equivalentes a 100 pisos.
Si lo que buscas es solo quemar calorías y hacer que tu cuerpo entre en calor, puede optar por una pequeña sesión de no más de 7 u 8 minutos antes de tu periodo de entrenamiento con pesas.
Por el contrario, si lo que buscas es lograr que tu cuerpo tenga una mayor oxigenación y el llamado bombeo muscular, puedes optar por una sesión de unos 15 a 20 minutos después del entrenamiento.
Cabe destacar que, si haces el entrenamiento de cardio al final de tu rutina, consumirás una mayor cantidad de calorías que si lo hicieras al principio, pues tus niveles de glucógeno ya se habrán activado en tu entrenamiento anaeróbico.
Otro consejo es que no siempre utilices la caminadora para ejercitarte, varia tus ejercicios en otras máquinas, además puedes intentar aumentar la intensidad en el tablero de control de cualquiera de estos aparatos, pues eso te ayudará a trabajar más en menos tiempo.
dhfm
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