En la actualidad hay un sin fin de dramas coreanos, pues hay historias románticas y cómicas, así como thrillers, sobrenaturales y de suspenso. Varios de estos proyectos llegan a combinar los géneros haciéndolos así una propuesta atractiva debido a que generan diferentes emociones en los espectadores. Es por eso que hay tramas que hacen llorar sin parar, y para suerte de muchos, algunas de estas producciones están en Netflix.
La plataforma de streaming fue una de las primeras en incluir k-dramas en su catálogo, teniendo mucho éxito, pues ahora produce sus propios contenidos, los cuales son del gusto del público y de la crítica. Así como tiene producciones de comedia romántica, también ha creado historias con tramas desgarradoras o llenas de nostalgia que han movido los sentimientos de más de uno.
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La buena mala madre
Esta historia se centra en Young-soon (Ra Mi-ran), una madre que enviudó muy joven y se encarga de una granja de cerdos, así como de cría sola a su hijo Kang-ho (Lee Do-hyun). La mujer decide ser una "mala madre", pues es muy rigurosa con su hijo para que este crezca con ambiciones. Al paso de los años, el joven se convierte en fiscal, sin embargo, un accidente hace que vuelva a comportarse como un niño de siete años. Esta historia enseñará como sanar las relaciones entre madre e hijo.
Está bien no estar bien
Gang-Tae (Kim Soo Hyun) es un cuidador en una sala psiquiátrica; ahí conoce a la famoso escritor de libros infantiles, Ko Moon-young (Seo Yea-ji) de quien rumora tiene un trastorno de personalidad antisocial. Los personajes se envuelven en un romance, sin embargo, se destapan muchos secretos de sus vidas y buscan consuelo el uno en el otro, desatando una serie de dilemas.
Veinticinco, veintiuno
Esta historia acompaña a Na Hee-Do (Kim Tae-ri) es una esgrimista de su escuela secundaria, pero por la crisis financiera de Corea del Sur, el equipo se disuelve, y a Baek Yi-Jin (Nam Joo-hyuk) un niño rico que también es afectado por la crisis por lo que pasa a ser pobre. A pesar de que se conocieron en su juventud, no es hasta que tienen 25 y 21, cuando se enamoran y se acompañan mutuamente. Aunque es una historia es muy romántica, el final es desgarrador.