ESCENA

El actor Rodrigo Murray aprende del fracaso a través de la vida de Leonardo da Vinci

El actor Rodrigo Murray profundiza en la vida del artista para encontrar su lado humano

ESPECTÁCULOS

·
El actor Rodrigo Murray profundiza en la vida del artista para encontrar su lado humanoCréditos: Foto: Mariana Xareni

Si hay una figura a la que Rodrigo Murray respeta y admira desde que era niño, es al polímata Leonardo da Vinci, pero no por la genialidad con la que todo el mundo lo conoce, si no por ese lado humano que aprendió a ver en él, esa parte que lo hacía mortal como a cualquier otro hombre: el fracaso.

“Fracasar es una actividad malentendida en nuestra educación actual, parece que es una derrota, pero es sin duda uno de los eslabones de una cadena infinita con la que se trata de alcanzar el éxito… Me di cuenta que Da Vinci también fracasó como cualquier otro humano, él no hizo todo a la primera y son estos caminos de búsqueda los que nos acercan al genio”, afirmó el histrión. 

Murray considera que el fracaso es entre otras cosas el lado más humano que tienen los hombres y las mujeres que habitan este planeta, que permite aprender, por eso lo ve como algo positivo, porque sin éste no tendría sentido la vida.

“He fracasado en un sin fín de cosas, desde que era un bebé y estaba aprendiendo a caminar, cada caída fue un fallo, pero al final lo logré. Todos los días tenemos dificultades amorosas, intelectuales, deportivas y hasta económicas que nos permiten crecer”, detalló. 

Esta admiración por el pintor y escultor la muestra en la obra de teatro “Leonardo”, donde lo descifra a fondo y lo acerca al público, sin la dureza de un texto escolar y conociendo más al hombre.

“Siempre sentí una especie de identificación con él, pero no sabía en qué, después me di cuenta que era en su interés y preocupación por el entorno. Le gustaba la investigar, inventar y descubrir cosas. Así, empecé a escribir este monólogo que tiene su reestreno en el Teatro Hélenico”, contó.

El monólogo de una hora y cuarto de duración, Leonardo comparte escenario con la pieza del maestro Sebastián, un cubo de dos metros cuadrados que se va desarmando conforme avanza la obra. Además, Murray va contando la historia mezclando personajes, por un lado Da Vinci y por otro a “Rodrigo”, un actor que teme no lograr la función.  

EL TEATRO, SU PASIÓN 

Para Murray, el escenario lo es todo, pero agradece que su trabajo en televisión y cine lo mantengan vigente entre las nuevas generaciones y recibiendo saludos de la gente que lo reconoce en la calle y para quiénes trabaja. Aunque ha interpretado a antagonistas o personajes cómicos, no sé cansa de ninguno, tampoco cree que le haga falta interpretar cierto papel. 

“Aún me faltan muchos personajes por interpretar, sino sería el fin. Esta es una carrera que escalas todo el tiempo, porque si llegas a la cima, el siguiente paso sería para abajo, y no. Yo  sigo subiendo la montaña. El mejor papel es el que viene”, finalizó.  

A DETALLE

  • El monólogo se presenta los sábados y domingos a las 13:00 horas, en el Teatro Helénico.
  • El año pasado dio sólo ocho funciones de esta obra en el Teatro Xola.
  • Su admiración por el escultor la heredó de su papá, el actor argentino Guillermo Murray.
  • Tras cada función tiene un conversatorio con los asistentes al teatro.
  • 1991 entró al medio.
  • 69 créditos en audiovisuales.

 

MAAZ