Mariana Rodríguez se convirtió en mamá de una pequeña niña llamada Mariel, y junto a su esposo el gobernador de Nuevo León, Samuel García, compartieron a los medios y a sus seguidores que tendrían un bebé, y desde entonces actualizan sus redes sociales con fotos de Mariel, y de cómo es su vida en esta nueva etapa como padres.
Mariana se desempeña como primera dama, pero también sigue activa como influencer, ante esto es común que comparta sus rutinas del día a día, sobre todo fotos de ella, y debido a esto le han llegado algunos comentarios sobre su físico.
Mariana Rodríguez recibe cuestionamientos sobre su cuerpo
A través de las historias de Instagram, el pasado 20 de julio subió un vídeo donde comenta que a diario recibe comentarios de personas preguntando si está embarazada de nuevo por su pancita que suele sobresalir en ocasiones.
Para todas, las que a diario me dicen que si estoy embarazada, no estoy… Aquí tengo una pancilla que durante el día se va inflamando, y a lo mejor sí parece, pero no estoy.
La influencer dío a luz hace cuatro meses, y en ese periodo de tiempo es normal que cualquier mujer tenga algunos cambios en su figura, como puede ser el aumento de peso. Es importante recordar que el proceso de recuperar el físico que se tenía antes de embarazarse puede ser difícil para algunas mamás, y en ocasiones llega a ser complicado para ellas al escuchar comentarios que cuestionan su imagen.
Conoce más sobre los cambios que las madres experimentan durante y después del embarazo, y comprende mejor esta etapa desde la experiencia de dos madres que vivieron una transformación completa de su cuerpo, y aprendieron a aceptarlo. Aquí puedes escuchar el capítulo especial que habla sobre la presión social que sufren las mujeres al dar a luz.
La presión de regresar al cuerpo de antes
Mariana también agregó que va a esperar a terminar la etapa de la lactancia para retomar el ejercicio: “Pero dejen que vuelva a hacer ejercicio con Nancy, dejando la lactancia, pa´ que vean, se me va a marcar esa panza, van a ver”
Complementar la etapa de post parto con ejercicio puede ser bueno, siempre y cuando sea supervisado por un profesional, siguiendo ciertas indicaciones, pero sobre todo, si se desea hacerlo debe ser por voluntad propia, y no por presión social.