La impresionante actuación de Brendan Fraser en la cinta “La Ballena”, le ha valido al histrión el reconocimiento del Sindicato de Actores y decenas de nominaciones en galardones como los Oscar o los BAFTA.
Sin embargo, no solo la dramática interpretación de Charlie, un profesor con obesidad mórbida, destaca en esta cinta, dirigida por Darren Aronofsky: también resalta la caracterización a la que se sometió Fraser durante el rodaje.
De acuerdo con las notas de producción, el actor de “La Momia” pasaba alrededor de cuatro horas en maquillaje, aguardando pacientemente a que los expertos le aplicaran la caracterización para su personaje, la cual tenía un peso de 90 kilos.
“Desarrollé músculos que no sabía que tenía. Incluso sentía una especie de vértigo al final del día, cuando los prostéticos eran removidos, era como pararse fuera del muelle en un bote en Venecia.
“Me permitió apreciar a quienes tienen cuerpos similares. Necesitas ser una persona increíblemente fuerte, tanto mental como físicamente, para poder habitar en esta condición física”, señaló Fraser en declaraciones hechas para la revista Variety.
De acuerdo con el protagonista, la caracterización era un punto vital en la película, pues permite a la gente mostrar una mayor empatía con los problemas del personaje central, tanto físicos como en términos emocionales.
“Era necesario que el vestuario obedeciera a la física y a la gravedad, para diferenciarlo de otras películas que hemos visto a lo largo de los años que solo ponen una silueta alrededor de un actor más o menos atlético y que funciona más como una broma peyorativa.
“Esto es completamente diferente. Es una persona viviendo con obesidad y su salud física y mental resulta dañada, por eso debíamos tener el maquillaje adecuado. Y creo que lo logramos”, apuntó Fraser.
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