Dentro de las filas del Cine Mexicano se pueden contar una gran cantidad de villanos que hicieron de las películas algo memorable, como es el caso de este luchador que triunfó en la industria fílmica de nuestro país y también en Hollywood junto a un integrante de The Beatles.
Gerardo Zepeda, conocido con el apodo de "Chiquilín", nació en 1938. Comenzó a luchar desde muy joven, y durante quince años se le vio arriba de los cuadriláteros con el nombre de "El Romano" para el bando de los rudos, enfrentando a grandes figuras de la época, pero su estatura e imponente físico lo llevó al cine.
Fue el también luchador y actor Jesús Velázquez Quintero, conocido como "Murciélago Velázquez", quien lo recomendó en 1963 para realizar un pequeño papel en la película "Las luchadoras contra el médico asesino", del prolífico director René Cardona, donde éste fue uno de los protagonistas.
Su paso por el Cine de Ficheras
Luego de su primer participación en cine, Zepeda empezó a interpretar principalmente roles de villanos, apareciendo en producciones cinematográficas como "Viento negro" (1964), "Doctor Satán" (1966), "Blue Demon contra las Diabólicas" (1968), "El águila descalza" (1971), "La noche de los mil gatos" (1972) y "La horripilante bestia humana".
En la década de 1980, el famoso villano incursionó en el llamado Cine de Ficheras, apareciendo en reconocidas producciones del género como "El día de los albañiles", "Los verduleros" y "Piernas cruzadas", compartiendo créditos con actores como Alfonso Zayas, quien conquistó a una infinidad de bellas mujeres.
Gerardo Zepeda filmó junto a Ringo Starr
Con cerca de 300 películas y más de 40 años de carrera artística, Gerardo Zapeda también incursionó en el cine estadounidense con una participación en la cinta Caveman (El cavernícola), película del género de comedia de 1981 protagonizada por el ex integrante de The Beatles, Ringo Starr, y donde el mexicano interpretó a Boola.
La película fue filmada en varias localizaciones de México como en el parque nacional Sierra de Órganos a 15 minutos del municipio de Sombrerete, en el estado de Zacatecas, así como en los estudios "Churubusco Azteca" en la Ciudad de México, ahora las instalaciones del CENART.
Durante la década de 1990, la presencia de Gerardo Zepeda en el Cine Mexicano fue menos notoria, realizando su última aparición en la película "Chavos de la calle", de 2001. También tuvo una exitosa aparición en la telenovela "Dos Mujeres y un Camino". El famoso villano falleció a causa de la diabetes en el año 2013.
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