Las canciones de Roberto Carlos son tan misteriosas que incluso hay algunas de las cuales ni él conoce el significado, En algunas entrevistas dijo incluso que su trabajo era cantar y no entendía piezas como "El gato que está triste y azul"; sin embargo, dentro de su repertorio hay algunas melodías que son cantadas con objetivos muy claros, este es el caso de "Lady Laura".
Esta pieza musical está dedicada a su madre, quien no lo dejó nunca solo y lo apoyó en todo sentido. Si bien habla de sentimientos positivos hacia la mujer que lo trajo al mundo, también oculta una historia trágica, de la cual salió lo mejor para el intérprete.
"Cuando era un niño, y podía llorar en tus brazos, y oír tanta cosa bonita, en mi aflicción".
"Y en momentos alegres, sentado a tu lado reía, y en mis horas difíciles dabas tu corazón"
Basta con notar esta estrofa de la canción, que aunque parece poética, permite saber un poco más del carácter del brasileño cuando era niño. Es común que en los recuerdos se añore la infancia; sin embargo, es poco habitual que sobre estos momentos se hable de aflicciones, dolor u horas dolorosas.
Una historia desgarradora
De pequeño, el intérprete de "Detalles" era retraído, tímido y no solía intimar con muchas personas además de algunos pocos amigos y su mamá. Pese a esto, gustaba de jugar como cualquier niño.
Cuando tenía seis años de edad, el joven Roberto Carlos Braga Moreira, su nombre real, sufrió el accidente que marcó su vida. Se encontraba jugando cerca de las vías de la locomotora cuando esta lo arrolló.
Obviamente, la lesión no le quitó la vida, pero sí ocasionó que se enfrentara a una lesión por la cual tuvieron que amputarle la pierna derecha desde un poco debajo de la rodilla.
Este accidente marcó tanto al cantante que aún hoy, a sus 80 años se niega a hablar de ese suceso por el cual ha tenido que usar una prótesis para caminar desde entonces.
No lo paró la desgracia
Con pocas oportunidades para desarrollarse en un trabajo físico, debido a la discriminación que había en ese entonces, Roberto se inclinó por la música.
Fue en 1968 que participó en la décimo octava emisión del Festival de San Remo, el cual ganó, con lo cual cimentó el camino para una carrera exitosa que no paró hasta que llegó la pandemia.
Inspirado en el amor y en el apoyo que su madre, Laura Moreira Braga le dedicó a lo largo de varios años, el intérprete creó la canción "Lady Laura", la cual lanzó en 1978.
Además de convertirla en un hit como pocos, el intérprete dio origen a una letra tierna que representaba todo lo que amaba de su mamá, quien se sintió orgullosa de ella hasta el 17 de abril de 2010, fecha en la que murió en Río de Janeiro a sus 96 años.
La despedida de Roberto y su madre no podía ser otra, así que frente al féretro, se acercó a ella y le interpretó esta canción que ha conquistado millones de corazones año con año.