La animación es uno de los campos que los japoneses han sabido explotar de manera sistemática desde que este arte surgió en el país asiático en 1916, con la película “Imokawa Mukuzo Genkanban no Maki”; sin embargo, los nipones no son los únicos que pueden entrar en este tipo de expresión audiovisual en el continente.
Ejemplo de esto es “Scissor Seven”, una serie de manufactura china que es parte del catálogo de Netflix y se ha convertido en uno de los favoritos de la comunidad amante de este tipo de entregas.
Con dos temporadas publicadas en occidente y una más en vías de ser incluída en la plataforma de streaming, la producción sigue la historia de Seven, un peluquero que quiere convertirse en un asesino famoso y puede dominar un par de tijeras con poderes telequinéticos.
Si bien la premisa puede sonar un tanto oscura, esta animación es apta para personas de cualquier edad, aunque se aconseja que los menores de edad estén acompañados por sus padres.
¿Por qué destaca entre los animes?
Uno de los encantos de esta producción está en que los personajes fueron animados con un estilo más cercano a la historieta que a seres humanos reales. Esta situación se adereza aún más por el paso de colores brillantes a oscuros, dependiendo del momento que viva el protagonista.
Además de esto, en el mundo de “Scissor Seven” el protagonista interactúa y habla con varios animales, principalmente dos aves que cuentan con gran carisma y además amenizan todos los momentos en las que son incluidas.
Otra de las razones que destacan en la obra es la profundidad que tienen los personajes, pues aunque en los primeros episodios estos parecen ser planos, conforme avanza la trama se van descubriendo secretos sobre su su pasado y la razón por las que actúan de tal forma.
Todos los seres de ficción de esta obra resaltan además por mostrar una faceta, pero mostrar una completamente diferente a lo largo de los capítulos.
Al ser una historia ligada a los combates, la acción se presenta a cada minuto, situación que se combina con momentos ridículos que le dan un toque de humor simple, pero efectivo a la serie.
Sin embargo, los momentos épicos son acompañados de música estridente que puede causar en la mayoría una sensación de euforia que no le debe nada a cualquier otra entrega del estilo.
En total, son 20 episodios de la serie regular y cuatro especiales en los que se cuentan aspectos más profundos de los protagonistas.
Por si fuera poco, la resolución de las problemáticas, está ligada a valores que permiten que el espectador común tener lecciones de vida interesantes generalmente ligadas con los prejuicios que se tienen sobre los otros.