El miércoles 9 de junio se estrena Un lugar en silencio parte II (A Quiet Place Part II), cuyo lanzamiento se tuvo que posponer más de un año en México debido a la pandemia por el Covid-19, sin embargo, han salido a relucir muchos aspectos de la producción, como la escena que rodó Emily Blunt, en la que puso en riesgo su vida para darle más originalidad a la película.
El actor, escrito y director John Krasinski se mostró un tanto renuente para grabar la segunda parte de Un lugar en silencio, ya que tenía miedo de que la película fuera vacía y sólo estuvieran aprovechando el éxito que tuvo la primera entrega que salió en 2018.
Hay que recordar que la primera película se produjo con tan sólo 17 millones de dólares, pero en taquilla alcanzó más de 340 millones de dólares, por lo que su éxito fue rotundo, algo que se logró gracias a las buenas críticas y al efecto de boca en boca, en este caso a través de las redes sociales.
A pesar de que Krasinski dijo en un principio que no haría la segunda parte, las ideas fueron llegando y encontró la forma para contar la historia y que tuviera una continuidad, sin caer en lo terrible. Prueba de lo anterior es que en otros países en los que ya se estrenó el filme ha recibido buenas críticas y hasta se aprobó el rodaje de un spin-off, en el que no se verá involucrado el director.
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Sin embargo, en Un lugar en silencio parte II tenían como objetivo entregar algunas escenas con más realismo y adrenalina, por lo que el director John Krasinski tuvo que pedirle a su esposa y también protagonista Emily Blunt que rodara una secuencia un tanto peligrosa. La actriz tuvo que conducir en reversa mientras un camión pesado la perseguía de frente a una velocidad de 64 kilómetros por hora. "Lo que hizo Emily es tan real que creo que arriesgué mi matrimonio cuando la metí en el coche", dijo el también actor.
Pero eso no fue todo, porque en la escena también hay niños involucrados, para lo que tuvieron que adecuar el automóvil y el camión pesado, así como unos "descansos especiales" por si había necesidad de frenar de imprevisto. El esfuerzo fue enorme y tuvieron que ensayar durante tres semanas completas para lograr un minuto de grabación, el cual vale la pena ver en pantalla.
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