Si el amor es el que motiva la revolución, para César Luis Menotti, fallecido a los 85 años, fue natural ser el vehículo rebelde para modernizar el futbol, según el propio Pep Guardiola, por el cariño a la pelota, la pasión por el buen juego y la vocación para ser mentor.
Lo robusto del Flaco no estaba en el cuerpo, sino en la mente, en las ideas que plasmó en la cancha para ser Campeón del Mundo con Argentina en 1978, llegar al Barcelona de principio de los años 80, y al Tricolor, en 1991, como el lucero que trazó un antes y un después en el México.
“Es el técnico que marcó mi carrera, el que me cambió la visión del futbol. Trabajó mi manera de perfilar, de fintar antes de definir. Se preocupaba por hacer crecer al futbolista, la mentalidad fue primordial. Miguel Mejía Barón recogió lo que Menotti sembró”, contó Carlos Hermosillo a El Heraldo de México.
Conmovido por la noticia, el exdelantero agregó: “Guardando dimensiones, dijo que lo que hace Guardiola quiso hacerlo con nosotros y sus equipos, era un técnico adelantado. Con él pudimos conseguir cosas más grandes de las que se han obtenido. Me duele su partida. Tenía una relación muy cercana”.
Emilio Maurer y Francisco Ibarra, entonces presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), lo invitaron a dirigir la Selección Mexicana en 1991, un acierto que echaron abajo sus detractores, como una televisora y Don Ignacio Trelles, que permitieron al Flaco sólo dirigir 16 partidos como técnico nacional.
En 2007, Menotti volvió a México para dirigir a los Tecos de la UAG, con paso efímero, en compañía de Jaime Ordiales, a quien seleccionó al Tri, y convocó para ser auxiliar en dicho club. “El hecho de que te llamara, era sentirse honrado por quién era él“, explicó el exmediocampista.
“Él decía que el jugador mexicano era muy dócil para sacarle muchas cosas, con voluntad y entrega. Cuando llegó nos dijo: ‘tal vez no son los más fuertes o resistentes, pero tienen la picardía y la habilidad latina, son muy completos para competirle a todos los equipos del mundo’. Nos hizo creérnosla”, recordó.
La pasión y profundidad en el análisis de Menotti, lo llevaron a dar el salto del banquillo a la televisión, como analista en TV Azteca en los Mundiales de 1994, 1998 y 2002. “Captaba la atención de todos por su presencia y su personalidad y transmitía muy fácil sus ideas”, dijo Ordiales.
En 2019, Menotti se convirtió en Director de Selecciones Nacionales de Argentina, y desde entonces La Albiceleste conquistó la Copa América 2021, la Finalísima (2022) y la Copa del Mundo de Qatar. Tal y como hizo en 1978, pese a no convocar a Diego Armando Maradona, convirtió la utopía en realidad, dejando ese “hubiera” en México más al aire que un balón
“No supimos valorar a este gran hombre que vino al futbol mexicano y con él hubiéramos hecho algo más grande de lo que hemos hecho hasta ahora”, concluyó Hermosillo, sabiendo que si sus ideas terminaron con el mote de los Ratones Verdes, pudo terminar con mucho más.
Enemigo de “ganar como sea”, y creyente de que “las formas importan”, más allá de la victoria, para muchos, el “Menottismo” pasó de ser una filosofía futbolística, a convertirse en un estilo de vida, pero siempre con la pelota, y ese fuego ardiente que le nacía del corazón, le recorría por el cigarrillo y le hacía mover la cabeza, porque ni en el amor ni en la revolución se permite la tibieza.