En 1940, Gerardo Murillo Dr. Atl conoció a José Palacios Macedo, un médico mexicano que le acompañó en el proceso de amputación de su pierna derecha y el cuidado posterior de su salud; esa relación, gestada por la mutua admiración y el agradecimiento, llevó al artista a obsequiarle algunas obras que se exhiben por primera vez.
Hasta el 12 de agosto, el Museo Kaluz alberga El doctor del Dr. Atl, exhibición que incluye 25 obras inéditas, notas periodísticas, fotografías y una serie de documentos que narran la relación entre el artista y el médico y que recorren una etapa creativa de Murillo que va de 1940 a 1967, cuando se adentró en el paisaje y la observación y estudio de los volcanes, señaló Miguel Fernández Félix, director del Kaluz.
La muestra incluye otro recurso inédito: la recreación de la voz del Dr. Atl por medio de inteligencia artificial. Al final del recorrido se incluye un video de 10 minutos, sobre la formación de un volcán y tomas aéreas del Paricutín, que incluye la voz del artista, creada a través de la herramienta ElevenLabs, a partir de un audio original que conserva la Fonoteca Nacional.
El material titulado El mejor de los testigos retoma los textos Un nuevo género de paisaje. El Aeropaisaje (1958) y Cómo nace y crece un volcán (1950), así como una conferencia que el Dr. Atl dictó sobre Olinka, la ciudad ideal que creó.
“Es una herramienta didáctica, no descubrimos el hilo negro, fue un recurso para que el espectador pueda escuchar al Dr. Atl”, dijo Fernández Félix.
En la exposición se exhibe un retrato de Palacios, fotografías de ambos en sus visitas, bocetos, dibujos y pinturas.
PAL