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Agrietamiento súbito en la Catedral Metropolitana

El responsable de la restauración del inmueble afirma que en los últimos ocho meses aparecieron las fisuras que provocaron filtraciones de agua en el edificio

EDICIÓN IMPRESA

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Créditos: Cortesía INAH

En los últimos ocho meses, la Catedral Metropolitana estrenó grietas. De enero a la fecha, en el inmueble histórico aparecieron fisuras que no existían en diciembre del año pasado cuando concluyó su segunda etapa de restauración, lo que provocó “una filtración de agua importante” en el área del presbiterio, afirmó el arquitecto Arturo Balandrano, director de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural de la Secretaría de Cultura.

El responsable de las obras en el edificio, que han representado una inversión de 54 millones de pesos, negó que las afectaciones se deban a “irregularidades” en los trabajos que coordina y dijo que la aparición “súbita” de las fisuras se deben al “hundimiento permanente” que afecta a la Catedral desde su construcción, “sobre un suelo fangoso que tiene muy baja resistencia al peso del conjunto”.

Los hundimientos, afirmó, “pueden darse a veces de manera súbita por alguna vibración que pudiera haber por el Metro, por ejemplo, y las construcciones que se hacen aledañas, precisamente en la calle de Guatemala hay dos predios que tienen actividad constructiva en este momento y eso creemos que puede haber sido un factor de vibración para que el hundimiento de la Catedral se diera súbitamente”.

(Créditos: Cortesía INAH)

Balandrano negó, sin embargo, que las concentraciones cívicas y los conciertos masivos que han reunido hasta 300 mil personas en el Zócalo sean otra causa: “Cuando las torres de la Catedral sufrieron daños por el sismo se apuntalaron, estaban vulnerables ante otro sismo de intensidad mayor, y a pesar de esa situación nos aseguramos que el monumento estuviera seguro, estructuralmente hablando y que las actividades en el Zócalo: conciertos, desfiles, presencia de aeronaves en las paradas militares, no hayan tenido afectaciones hacia el conjunto catedralicio”.

Tras la aparición de goteras en el Altar del Perdón, el Altar Mayor y Altar de los Reyes, el rector de la Catedral Ricardo Valenzuela Pérez pidió a la Secretaria de Cultura, Alejandra Frausto, poner fin a las “irregularidades” en la restauración del edificio y agilizar el trámite de los recursos para la tercera fase de las obras. 

De acuerdo con Balandrano, las grietas detectadas serán cubiertas con una lona de plástico mientras comienzan los trabajos, programados para iniciar en septiembre y concluir en diciembre. Las filtraciones de agua, dijo, “afortunadamente sólo provocaron que se humedeciera el aplanado, que es un enlucido que protege la mampostería arquitectónica de la bóveda; al humedecerse se abomba y pierde consistencia y genera desprendimientos. La afectación es fundamentalmente la pintura en el acabado de cal y arena que protege la mampostería y eso, en cuanto se seque, lo volvemos a poner, lo volvemos a pintar con las técnicas tradicionales y antiguas”.

  • El hundimiento de la Catedral, afirma Balandrano, provoca la aparición súbita de fisuras
  • También se produce por el paso del Metro en el subsuelo y por las construcciones activas
  • En el Zócalo se han realizado conciertos masivos que reúnen hasta 300 mil gentes, pero ese no es factor de riesgo 

PAL