En México hay 650 mil viviendas abandonadas, tan sólo del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), que se arrastran desde administraciones pasadas, porque fueron construidas sin contar con servicios, transporte o escuelas, aseguró Daniel Fajardo, subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda, de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu).
En entrevista con El Heraldo de México, en la víspera de la presentación de la Estrategia Nacional de Movilidad y Seguridad Vial (ENAMOV) del próximo 22 de junio, Fajardo reveló que el problema de las casas abandonadas es que no se ha vinculado el desarrollo urbano con la movilidad.
“Si seguimos manteniendo ciudades que crecen expansivamente y dando facilidades para que los constructores sigan haciendo unidades habitacionales a cinco kilómetros de la mancha urbana sin transporte público, con problemas, eso está generando casas abandonadas”, expresó.
Un ejemplo, señaló, es Zumpango, “la mitad de las casas están abandonadas. Las compró la gente, pero no les conviene seguir viviendo allá, por lo que hacen de tiempo (para llegar al trabajo), lo que gastan y además por la inseguridad que hay en el transporte público”.
Dijo que, con la ENAMOV, la movilidad será esencial de la planeación urbana, es decir, si no hay condiciones de transporte y servicios no deben concederse los permisos.
Por eso, la Sedatu está colaborando con los gobiernos municipales, “este año estamos haciendo 123 planes de desarrollo urbano, y el próximo año se harán otros, hasta llegar a 500 en este sexenio”, comentó.
Destacó que, “las principales ciudades del país todas tendrán un plan Municipal de Desarrollo, y el eje rector será la movilidad”.
Otro componente importante, “incluso más que la planeación es el transporte público, en el que estamos haciendo un énfasis porque es la medida de igualdad, además debe verse con perspectiva de género, para proteger a la mujer que diariamente es agredida en este medio”.
LSN