Pumas sufrió un fuerte golpe como local en el encuentro de ida de las semifinales del Apertura 2023, al caer ante Tigres 1-0 ante otra buena entrada en el Estadio Olímpico Universitario.
Con el apoyo desde las gradas, el cuadro capitalino empezó con fuerza el partido y ese afán lo llevó a tener su primera llegada desde el minuto 5, con un tiro de Eduardo Salvio que pasó cerca del poste izquierdo.
Pero la escuadra regiomontana poco a poco fue equilibrando la situación, con base en contragolpes, y de apretar el mediocampo, hasta tener mayor posesión del esférico.
A pesar de las ausencias de elementos como André-Pierre Gignac y Luis Quiñones, el ataque se vio representado por Nicolás Ibáñez, quien fue el elemento más punzante y tuvo tres acciones claras sobre Julio González.
Ahí aparecieron la figura de los dos arqueros, los cuales se llevaron el show, con atajadas importantes que mantuvieron el cero en los primeros 45 minutos. Primero con Nahuel Guzmán, al 34' y 35' con dobles atajadas a Gabriel Fernández y al Toto Salvio.
Pero la mayor de todas fue, al 43', con una salvada que Julio González hizo en un remate de cabeza de Nicolás Ibáñez que rozó el poste.
Pumas entre las cuerdas
Pese a su afán de ir por la victoria, el duelo se le complicó a los de caza con la expulsión a la mitad del campo de Ulises Rivas, al 62', algo que le permitió a su rival tener aún mayor dominio y posesión de la pelota, y marcó el 1-0 con disparo de Jesús Angulo que no supo controlar González.
Sin importar tener un hombre menos, el cuadro local tuvo el impulso para ir al frente para por lo menos rescatar la igualada. Pero en la desesperación, la puntería le falló, pese a la presencia de Gustavo del Prete en los últimos minutos.
Pumas necesita ganar por dos tantos, mientras que Tigres con una victoria o empata le basta para su segunda final consecutiva.
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dhfm