Mirna Ponce huyó el pasado 14 de noviembre desde el departamento de Olancho, en Honduras, tras el asesinato de su hermana Blanca, a quien pandilleros extorsionadores decidieron matar por no pagar la cantidad de dinero que habitualmente le cobraban. La mujer no tenía más dinero y en una calle la tomaron por sorpresa y le quitaron la vida.
Mirna, junto a su esposo y tres hijos, al igual que cientos de migrantes, tuvo que esconderse durante varios días y de madrugada vestirse de migrantes y comenzar el duro viaje hacia México.
“A mi hermana la veló otra gente, nosotros no podíamos hacerlo porque nos iban a llegar a matar también, ni siquiera pudimos despedirnos de ella”, lamentó entre sollozos.
Ahora, Mirna y su familia son parte de las 136 mil 934 peticiones de refugio a nivel nacional que ha recibido la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, Comar, en su corte de noviembre pasado.
De este total de peticiones, 74 mil 945 se hicieron en Tapachula, Chiapas. Es decir, más de 60 por ciento del total de migrantes realizó este registro en la localidad sureña. Otras 30 mil 201 se han realizado en la Ciudad de México.
De acuerdo con la Comar, en noviembre de este año, las peticiones de refugios las encabezan los haitianos con 43 mil 459 peticiones, seguidos de los hondureños, con 40 mil 142; Cuba, con 17 mil 686 solicitudes. El cuarto lugar lo encabeza Guatemala, con 5 mil 900; seguida de El Salvador, con 5 mil 896; y en sexto lugar está Venezuela, con 5 mil 388.
En este sentido, la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU, registró 686 personas migrantes fallecidos o desaparecidos a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México durante el año 2022, lo cual la ha convertido en la ruta migratoria terrestre “más peligrosa del mundo”.
En tanto, en noviembre pasado, en tan solo 24 horas, el Instituto Nacional de Migración localizó a 315 migrantes que, de manera irregular, intentaron llegar a la frontera norte de México, para llegar a la frontera con Estados Unidos.
Familias enteras ingresan a México tras haber cruzado países de Sudamérica, incluido el tapón del Darién (zona fronteriza entre Panamá y Colombia, considerada una de las más peligrosas para la migración a nivel mundial), otras que han viajado desde Centroamérica, Haití, Cuba y Medio Oriente y Asia.
LA OTRA MIGRACIÓN MEXICANA
Durante 2023, 50 mil mexicanos realizaron o están realizando algún tipo de estudio en el extranjero, principalmente Estados Unidos y Canadá, pero éste último es el destino predilecto: seis de cada 10 viajaron a ese país para estudiar.
De acuerdo con la organización Class Education, “de los 30 mil estudiantes mexicanos en tierra canadiense, 70% de ellos orientó sus estudios a licenciaturas, posgrados o diplomados; el otro 30% estudia o estudió cursos cortos, como idiomas, así como campamentos de verano o el high school”.
“Estudiar profesionalmente es la mejor vía para obtener una eventual residencia permanente, o, dicho de otra manera, ofrece la posibilidad real de construir un nuevo proyecto de vida en Canadá”, sostuvo Bruno Perrón, presidente de Class Education.
Por José Torres y Hugo Arce
EEZ