Para Emiliano Gironella “el arte es un motor de resonancia capaz de ayudar a visibilizar y concientizar sobre diversas situaciones y acontecimientos humanos”. Por ese motivo, junto a su madre, la también artista Carmen Parra, decidieron apoyar un proyecto en pro de la salud visual.
“La vista es el sentido más importante por el que existe mi pasión, por el que existe mi obra y por el que puedo existir, por lo que me es difícil concebir que una persona no tenga la posibilidad de disfrutar del arte y de la vida misma; en una relación de cercanía decidimos hacer tangible esta colaboración”, contó el artista plástico.
Ambos, madre e hijo, apadrinaron y amadrinaron la Primera Gran Subasta de Arte por la Visión, en favor del Instituto de Oftalmología Fundación Conde de Valenciana I. A. P. que se celebró ayer en el Hospital ABC de Santa Fe (institución que, en alianza con la fundación, atiende a personas con diversas enfermedades de los ojos, desde hace más de 50 años).
Además de obra de los padrinos, el remate incluyó más de 100 piezas, entre pintura y escultura, de al menos 50 artistas nacionales e internacionales como Pedro Friedeberg, Alberto Castro Leñero, Carlos Clausell, Juan José Díaz Infante, Manuel Felguérez, René Magritte y Andy Warhol, entre otros creadores.
Para Gironella, el ejercicio debe ser replicado por otros artistas, ya que el arte se conecta con todos los sentidos, incluido el de la vista y del “que algunas personas han sido privadas por motivos genéticos, o por alguna situación alterna”.
Para el también pintor Francisco Reverter, la subasta visibiliza no sólo el trabajo de sus compañeros artistas sino, sobre todo, de la labor de quienes hacen milagros, en este caso, los oftalmólogos.
“Ninguna lucha puede ganarse sin alianzas y qué mejor que el arte sea el aliado de las causas justas y de quienes no pueden costear algún tema relacionado con la salud”, afirmó.
PAL