Moody’s Investors Service descarta una recesión económica en México, pero no así una posible estanflación, consideró Renzo Merino, vicepresidente senior de la firma.
Explicó que el actual escenario base de México es que las presiones inflacionarias se mantendrán por el resto de 2022, con un descenso en 2023, pero aún cercano a 5 por ciento a finales del año, en términos comparativos estaría más alto de lo normal.
En el tema de la economía, si bien todo depende del punto de referencia que se tome, ya que su crecimiento antes de la pandemia estaba un poco por arriba de 2 por ciento y el que se espera es de 1 por ciento para el próximo año, una caída que no es tan drástica y se contempla que para 2024 regrese a 2 por ciento.
“El escenario base no es de una recesión, quizás lo más cercano al concepto de estanflación”, manifestó.
Agregó que el nearshoring no impulsará el crecimiento económico de México a más de 2 por ciento, al menos en el mediano plazo.
Refirió que el nearshoring está dándose con movimientos del continente asiático hacia México, pero no en un nivel que pueda cambiar la tendencia de crecimiento de 2 por ciento de la economía mexicana.
Explicó que derivado de la elevada incertidumbre que en México se ha dado en el último año, debido a temas como la Reforma Energética y sus implicaciones en la inversión.
Aunado al abastecimiento de energía, sobre todo en el norte del país, donde las compañías que quieren invertir en energía verdes.
PAL