Citigroup rechazó la oferta no vinculante presentada por Banco Santander para adquirir la parte de sus negocios en operación en México, informó el grupo financiero español en un evento relevante enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
“Con motivo del interés por la participación de Banco Santander en el proceso que está llevando a cabo Citigroup, Inc.(“Citigroup”), en relación con la potencial venta de ciertos negocios de su operativa en México, Santander confirma que presentó una oferta no vinculante y que, tras haber sido sometida a la consideración de Citigroup, el Banco ha sido informado de que no continuará en las siguientes etapas del proceso”, dice a la letra dicho comunicado.
Con esta noticia, Banorte y, quizás, Inbursa quedan como los postores conocidos para adquirir parte de los negocios del grupo estadounidense en el país y que son, su banca de consumo y empresarial, la administradora de fondos para el retiro, la aseguradora y todo su acervo cultural.
Además de mil 255 sucursales, ocho mil 944 cajeros automáticos y siete millones 373 mil 943 tarjetas de crédito, de acuerdo con información a mayo de este año de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Cabe recordar que la última valuación realizada por Credit Suisse sobre el valor de los negocios en venta de Citi bajo el paraguas de la marca Banamex es de entre siete mil millones y siete mil 300 millones de dólares.
De acuerdo con un estudio de Moody’s Investors Service del 7 de julio pasado, Santander y Banorte eran los dos bancos con mayor probabilidad de adquirir a Citibanamex. Aunque no descartó que bancos más especializados como Banco Azteca y Banco Inbursa puedan participar en la compra.
En ese sentido, Marcos Ramírez Miguel, director general de Grupo Financiero Banorte, al ser cuestionado ayer sobre como iban en el proceso, comentó que estaba obligado a guardar silencio al respecto en lo que restaba del año pero que “todo bien”.
En tanto que, dos días después, el presidente Andrés Manuel López Obrador, durante su conferencia matutina estableció “algunas condiciones” para el proceso de venta de Banamex como ser financiado con capital mexicano, que los accionistas participantes estén al corriente en el pago de sus impuestos; que la vasta colección de arte de Banamex permanezca en México; y que no haya despidos masivos.
Comentarios que consideró Barclays podrían tener implicaciones negativas para Banorte y Santander, ya que las restricciones a los despidos limitarían las posibles sinergias, además de que para Santander, estar bajo el control español lo descartaría por completo si se hiciera cumplir la primera condición, que es ser financiado con capital mexicano.
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