Es positivo para la banca de desarrollo que el gobierno federal tenga la dirección temporal de la empresa en concurso mercantil, Altán Redes, sin embargo, su éxito en el mediano y largo plazo dependerá de la eficiencia en la gestión el gobierno, consideró Moodys Local.
La calificadora refiere que el acuerdo de acreedore, además de dar el margen financiero a Altán Redes para poder seguir operando, hizo que el gobierno mexicano se haga con la dirección temporal de dicha empresa, con lo que puede alinea los incentivos para que el proyecto cumpla con todas sus obligaciones con Bancomext, Banobras y Nafin.
Toda vez, que del acuerdo por 388 millones de dólares alcanzado con sus acreedores, la empresa mexicana responsable de diseñar, desplegar, operar y comercializar la Red Compartida de Internet, estos tres bancos gubernamentales aportarán 41 por ciento de financiamiento.
Explicó que los recursos obtenidos, a través de un crédito DIP (Debtor in Possession, por sus siglas en inglés), permitirán garantizar la continuidad y seguridad en las operaciones y servicios de la empresa, lo que en el corto plazo da viabilidad financiera a la empresa.
En tanto que, agregó, a mediano plazo puede convertirse en una solución a la exposición que ya tenían estos bancos en este proyecto, pues de lo contrario la recuperabilidad de la exposición del Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) y Nacional Financiera (Nafin), hubiera sido limitada.
Asimismo, la estructura del DIP le da a la banca de desarrollo mecanismos y derechos corporativos para que les sea más fácil cobrar los créditos y tener garantías sobre la nueva exposición incremental, tales como: barrido de caja o colaterales hechos con acciones de la empresa.
Sin embargo, subrayo que con la nueva estructura la banca de desarrollo aumenta su exposición a una entidad emproblemada y los créditos otorgados originalmente no cuentan con las ventajas y derechos corporativos que tienen los actuales en la estructura DIP.
Advirtió que en el mediano y largo plazo, el impacto en el crédito para los tres bancos dependerá de qué tan eficiente es la gestión del Gobierno de México y la viabilidad del negocio de Altán Redes.
No obstante, Moody’s Local destacó que la banca de desarrollo cuenta, con la capacidad financiera para crear reservas necesarias que deriven en un futuro para esta exposición.
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