Una estructura de mucho orden, disciplina, perseverancia, terminar siempre lo que se inicia y el impulso que tuvo de su padre a hacer y ser lo que ella quisiera en la vida, permitió a Luz Adriana Ramírez Chávez, ser la primera directora general de Visa en México, la red mundial líder en pagos digitales.
Una mujer, que vive en el presente y aprendió a prepararse para tomar las oportunidades que se le presentan en el momento adecuado, viene de una familia conformada por tres hermanos hombres, ella, su papá y su madre, de quienes siempre recibió un trato igualitario, de oportunidades y de retos.
“Desde la familia y desde niña me desarrollé en un ambiente igualitario, equitativo, de mucho orden, de disciplina en el estudio, el deporte o en las diferentes cosas que cada uno estuviera haciendo, y sobre todo con un padre que siempre fue de impulsarme a hacer lo que yo quisiera en la vida”, manifestó la directiva.
Para Luz Adriana algo muy relevante que aprendió desde niña y que hasta la fecha continúa practicando consigo y con sus hijas, es siempre terminar lo que uno empieza, algo que ha sido importante en su vida personal y profesional, ya que da disciplina.
“Esas habilidades de disciplina y persistencia te llevan a la resiliencia, que cuando tienes fallas y errores y te caes, vuelvas a levantarte y vuelvas a salir adelante, y yo creo que de eso está hecha la vida”, subrayó.
Algo que también resalta mucho Luz Adriana y más en pláticas con mujeres jóvenes profesionistas que están en etapas tempranas del desarrollo en su carrera, es el crecimiento profesional ascendente, pero nunca de manera recta, sino con crestas y obstáculos, con bajadas que permiten acelerar y tomar otra velocidad.
Entenderlo y apreciarlo así, dijo, también da la perspectiva de cómo mujeres y como las que son madres, decidir desacelerar los ritmos, no así el crecimiento, para poder acelerar el enfoque en algunas otras cuestiones personales y de esa manera siempre sentirse plena, completa, poniendo atención y disfrutando cada periodo y etapa de la vida.
Un factor importante también es tener claro lo que le gusta a uno y lo que no, apuntó, ya que con esas dos líneas se puede ir decidiendo bien en la vida y como irse moviendo en ella.
El trabajar con los demás, en equipo, lograr metas conjuntas, esa parte social-profesional de logros, de metas conjuntas, ha sido uno de los grandes drives de la vida de Luz Adriana, permitiéndole seguir hacia adelante y llegar a Visa.
A decir de la directiva, el tener angustia, nervios, estar en un estado de alerta y de inseguridad y duda sobre las capacidades de una cuando uno cambia de trabajo, de puesto o se enfrenta a algo nuevo es algo normal, y más en el caso de las mujeres cuando se trata de posiciones en donde se está acostumbrado a ver hombres.
Esto es hasta que uno, mujer u hombre, se da cuenta que cuando se toma una posición o reto nuevo se tiene que aprender, mejorar áreas y que se logra con disciplina, persistencia, con estudio, con las habilidades blandas que hoy son más relevantes.
“Salir de nuestras zonas de confort por decisión propia, el crecer duele, ese es el mayor reto y logro para un crecimiento continuo”, manifestó Luz Adriana Ramírez Chávez.
“Lo más importante es la gente y en la medida que uno aprende a qué es lo que mueve a cada una de las personas, qué es lo que la motiva y encuentras como impulsar eso, entonces logras equipos de éxito”, Luz Adriana Ramírez Chávez, dirección general de Visa México.
Cifras
*Un tercio de pequeñas y medianas empresas en México son dirigidas por mujeres.
*70 por ciento de mujeres emprendedoras son jefas de hogar.
*40 por ciento de las mujeres ahorra.
*70 por ciento del ingreso de la mujer lo destinan a educación y salud de su familia.
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