Los grandes grupos gaseros van a prescindir de los repartidores de gas LP ante la caída de tarifas impuesta por el gobierno federal, por lo que éstos últimos quieren que Petróleos Mexicanos (Pemex) los contrate en la nueva empresa Gas Bienestar, informó la Unión Nacional de Industriales de la Carburación a Gas (Unicargas).
Pidieron al gobierno cumplir con el compromiso de combatir las estaciones ilegales, ya que por cada planta legal existen 20 irregulares, lo que apunta a que mil 680 instalaciones en la Zona Metropolitana del Valle de México operan sin permiso.
“No sé cuál sea la razón o el motivo por el cual los distribuidores ya no quieren trabajar con nosotros, estamos desconcertados y preocupados”, dijo Enrique Medrano, integrante de Unicargas y vocero del gremio Gasero Nacional.
Afirmó que los grandes grupos gaseros no han salido a dar la cara para ofrecer algún pronunciamiento a la opinión pública, tampoco han explicado a la población cuáles son sus márgenes y cuánto ganan por el servicio.
“Los que hemos dado la cara somos nosotros, pero ellos no han dicho nada, simplemente se enconcharon, se cerraron y dijeron ya no tengo margen comercial para ti y allí nos vemos”, asestó.
Ante esta situación los comisionistas están tocando la puerta del gobierno federal para poner a disposición su infraestructura, a fin de que Gas Bienestar cuente con repartidores.
“Gas bienestar, con todo respeto, no tiene infraestructura. Si ellos quieren, mañana le ponemos 100 estaciones”, afirmó a su vez José Enrique Puebla, presidente de Unicargas.
Arturo Carranza, experto en energía, afirmó que hay nulas posibilidades de que exista desabasto por el rompimiento entre los repartidores y los distribuidores, pero éstos últimos tienen el reto de conseguir tanques, cilindros y camiones en el menor tiempo posible para no afectar a los usuarios.
DZA