Los cambios que implica llevar a cabo la Reforma Laboral en México van a tardar más de 10 años, indicó Alfonso Bouzas, coordinador del Observatorio Ciudadano de la Reforma Laboral (OCRL).
“La Reforma de 2019 fue el primer paso para transformar el régimen jurídico laboral, pero su implementación y los cambios que las mismas modificaciones requieren no se van a concretar en menos de 10 años”, comentó Bouzas.
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Esta reforma entró en vigor el 1 de mayo de 2019, y cuenta con temporalidades de al menos cuatro años para concluir con su puesta en marcha, es decir, hasta 2023 podría ultimarse los tiempos establecidos legalmente.
Uno de los temas que se prevé van a tardar cuatro años, dijo, es la legitimación de los contratos colectivos de trabajo, y son los propios sindicatos los que tienen que realizarla.
En lo que va de la Reforma, de acuerdo con datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), sólo se han ratificado cerca de 1 por ciento de los convenios.
La propia STPS reconoce que al menos 85 por ciento de los contratos colectivos son de protección patronal, por lo que, es muy probable que no se legitimen y se establezcan los nuevos compromisos.
“La lentitud en este proceso se debe a que hay un desinterés por parte de los trabajadores, no es que no les importen sus derechos laborales, es que hay un aletargamiento en la participación de éstos en los sindicatos”, comentó Miguel Calderón director del Observatorio de Salarios de la Universidad Iberoamericana.
Además de la Reforma, el gobierno federal ha impulsado otras modificaciones laborales entre las que destacan los cambios en materia de Teletrabajo y la regulación del outsourcing, lo que hace aún más complejo el panorama, pues, aunque éstos también cuentan con plazos definidos, "no todas las empresas van a cumplir en tiempo y forma", indicó Bouzas.
PAL