El mercado de los bonos de carbono, una estrategia internacional para combatir las emisiones contaminantes y el cambio climático ha promovido la eliminación de hasta 10 mil 330 megatoneladas (millones de toneladas) de CO2.
Según un análisis de la firma Refinitiv, el valor mundial de estos papeles alcanzó 229 mil 89 millones de euros y creció 59 por ciento entre 2018 y 2020.
El monto equivale a 5.5 billones de pesos, lo que representa 22 por ciento de la economía mexicana en 2020, que ascendió a 24.86 billones de pesos.
Estos bonos son instrumentos financieros diseñados para reducir gases de efecto invernadero y consiste en establecer un tope máximo sobre las emisiones totales de uno o más sectores de la economía que debe disminuir cada año, de acuerdo con el estudio.
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Las empresas de estos sectores deben presentar un derecho de emisión por cada tonelada de CO2 que emiten, los cuales pueden comercializarlo con otras compañías, generando así un valor por los papeles emitidos y las metas de reducción cumplidas.
Actualmente, hay 24 mecanismos de emisión de estos instrumentos financieros en el mundo, principalmente en Estados Unidos, China, la Unión Europea, Australia, Japón, Chile, España, Tailandia, Colombia, Corea del Sur, entre otros.
Además existen seis iniciativas que se encuentran en diseño en países como México, Sudáfrica y Canadá, según datos del sitio Carbon Pricing Dashboard.
El viejo continente es líder en este mercado, ya que el Sistema Europeo de Comercio de Emisiones (EU ETS) representa casi 90 por ciento del valor internacional de este sector y acumula más de 50 por ciento del volumen negociado de bonos en 2020. Eso significa que ocho mil millones títulos de derechos de emisión cambiaron de manos en dicho continente durante el año pasado.
En México, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) diseña un programa de prueba del sistema para el comercio de emisiones, en donde trabaja con 10 sectores industriales y se promueve la participación de instalaciones cuyas emisiones anuales sean mayores a 100 mil toneladas de dióxido de carbono.
Entre las industrias que forman parte de este plan se encuentran la automotriz, cementera y calera, química, alimentos y bebidas, vidrio, siderúrgica, metalúrgica, minera y petroquímica, entre otros.
Para los expertos, estas iniciativas forman parte de los esfuerzos del gobierno para reducir la contaminación y transitar hacia una economía más sustentable con el ambiente.
“A medida que los compromisos climáticos corporativos, estatales y nacionales para reducir las emisiones continúan cobrando impulso, tanto en el tamaño del compromiso como en el volumen de entidades comprometidas, podemos hacer una transición rápida”, afirmó Reed Shapiro, experto de la plataforma Carbon Credit Capital.
Por Adrián Arias
adrian.arias@elherladodemexico.com
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