BANCO DEL BIENESTAR

Gobierno federal protegerá a los clientes del Banco del Bienestar

Los cuentahabientes van a ser respaldados por el gobierno 

ECONOMÍA

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Los cuentahabientes van a ser respaldados por el gobierno. Foto: Cuartoscuro Créditos: Foto: Cuartoscuro

Los clientes del Banco del Bienestar van a estar protegidos por el gobierno federal, en el supuesto de que esa entidad financiera cayera en un caso de insolvencia, explicó la vocería de la institución a El Heraldo de México.

Al convertirse en un futuro inmediato en un banco de primer piso (prestar y captar recursos del público en general), va entrar de inmediato el respaldo del gobierno federal, destacó. Refirió que este cambio de segundo a primer piso se va a concretar a partir de que se tengan funcionando plena y eficientemente sus dos mil 700 sucursales, lo cual es una obligación y promesa presidencial que buscan cumplir.

Contrario a la postura del Banco del Bienestar, el economista y político Mario Di Costanzo, refirió que existen lagunas legales en cuánto a la protección del ahorro de los clientes de esa institución, pues en su ley actual no se estipula qué pasa con los pasivos derivados de captación.

“Hoy te diría que con la ley como está no están cubiertos”, señaló. En todo caso, dijo, al ser un banco de desarrollo sus pasivos deben estar respaldados por el gobierno federal, ya que es lo que dice la ley. Sin embargo, eso representa una competencia desleal para la banca comercial, pues sus depósitos sólo tienen una cobertura de hasta 400 mil UDI’s.

Actualmente, los usuarios de la banca comercial cuentan con el seguro de depósitos bancarios, el cual es administrado por el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB). Los recursos para su integración provienen del pago de una cuota por parte de los bancos comerciales en operaciones. Este seguro protege los depósitos de los clientes físicos y morales hasta por 400 mil Udis (alrededor de 2.7 millones de pesos).

Di Costanzo comentó que otro punto para considerar es que actualmente este banco también se va a convertir en el principal dispersor de la nómina del gobierno, pero no tiene la infraestructura necesaria para dicha actividad.

POR VERÓNICA REYNOLD

MAAZ