El crédito que otorga la banca para adquirir un automóvil acumuló cuatro caídas consecutivas en septiembre, en medio de los efectos de la pandemia por el coronavirus.
En el mes se contrajo 3.15 por ciento con respecto a septiembre de 2019, lo que representó la segunda mayor contracción anual en la historia, de acuerdo con datos del Banco de México.
“Existe desconfianza entre la población para adquirir bienes que impliquen pagos de largo plazo, por el temor de quedarse sin empleo o ver reducido sus ingresos a causa de la pandemia”, comentó César Salazar, analista del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM.
Si bien el indicador de confianza del consumidor que mide la posibilidad de comprar un auto nuevo o usado en los siguientes dos años mejoró en los últimos meses, aún está en niveles de 2018 (96 unidades), lo cual indica que existe cierto temor de la población, de acuerdo con el Inegi.
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La venta de autos en México registra un deterioro importante. En octubre registró seis aumentos mensuales consecutivos; sin embargo, aún está 21.3 por ciento por debajo de los observado hace un año.
“Esto se explica por la debilidad que presentaba la demanda, incluso antes de los efectos negativos provocados por la pandemia; por el deterioro en el mercado laboral, bajos niveles de confianza del consumidor y una fuerte competencia por la importación de vehículos usados”, señaló Alik García, analista de Intercam.
El analista agregó que el regreso al semáforo rojo en algunos estados, como Chihuahua, también impacta en las ventas y, por ende, en el crédito.
Por Fernando Franco