No pudo ser más emocionante el cierre de la sexta fecha de la serie NASCAR en San Luis Potosí, pues si bien Rubén García Jr. se llevó la victoria, el piloto capitalino Rubén Rovelo se llevó las palmas al finalizar en la segunda posición tras haber remontado 28 puestos en una dramática carrera que culminó en 213 vueltas al Súper óvalo Potosino.
El piloto del auto 28 de la escudería Alessandros Racing y patrocinado por Grupo Andrade y El Heraldo Media Group, culminó su hazaña en 1 hora con 56 minutos y 55 segundos a sólo 288 milésimas del ganador, para subir al podio en segundo lugar, por delante de José Luis Ramírez, su último obstáculo en una carrera plena de incidentes.
La jornada clasificatoria del sábado no fue del todo buena para los pilotos de Alessandros, pues se colocaron el los puestos 28 (Aarón Cosio) y 29 de Rovelo.
Te puede interesar:
Noel León: el mexicano que sigue los pasos de Checo Pérez y apunta a la Fórmula 1
Las esperanzas de conseguir, al menos, estar en el top ten de una parrilla de 34 autos, estaba muy lejana. No obstante, conforme transcurría la carrera Rovelo comenzó a tomar fuerza al comando de su poderoso bólido marcado con el número 28. Para la vuelta 74, el capitalino ya se encontraba en la posición número 12. Aún así, el podio aún se veía lejano.
Una serie de banderas amarillas comenzaron a dejar fuera a varias máquinas y, con mejor suerte que en carreras anteriores, Rovelo salió bien librado y para la mitad de la carrera ya se encontraba en la séptima posición.
Vueltas adelante Rubén sufrió un leve trompo perdiendo algunos puestos; sin embargo volvió a tomar fuerza y se afianzó en el quinto puesto por varias vueltas. Por fin vio una puerta abierta para trepar al tercer lugar a solo 11 vueltas del final y tras otra bandera de advertencia Rovelo brincó su último obstáculo rebasando en la penúltima vuelta a Ramírez para un bien ganado segundo lugar.
Sigue leyendo:
Gran Premio de México: Cómo registrarme para ser voluntario en la Fórmula 1
Xavi Razo gana en Puebla; los pilotos de Alessadros Racing tuvieron poca fortuna