FÚTBOL INTERNACIONAL

Descubre los 5 apodos más insólitos del futbol

Muchos jugadores de fútbol son recordados por sus virtudes y otros por sus apodos. Conocé los más originales.

DEPORTES

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Fútbol, Apodos, Futbolistas.Foto: Eurosport

El mundo del fútbol no solo nos ha dejado momentos memorables para toda la vida, sino también nos ha entregado a los personajes más queribles (y odiados). Párrafo aparte para los apodos que han recibido distintos futbolistas, algo que los ha distinguido incluso más que su carrera deportiva. Existen miles de jugadores que reciben sobrenombres por sus cualidades físicas –altura, pelo, aspecto-, y también otros que son muy particulares, inventados por sus propios compañeros.

Uno de los apodos con mayor prestigio en el rubro es “El Estrangulador”, así le decían a Servet Cetin, futbolista turco que se desempeñó como defensor central y desarrolló toda su carrera en Turquía. Se ganó ese inédito sobrenombre no por estrangular a sus compañeros, sino por el aspecto intimidatorio y su cara de pocos amigos, algo que jugaba a su favor en cada partido.

La selección de Perú ha dado grandes glorias al fútbol mundial, y una que se destaca por su juego y también por su sobrenombre es  Jefferson “La Foquita” Farfán. El experimentado futbolista peruano se ganó el apodo por herencia familiar: su tío Roberto Farfán también fue futbolista y era llamado habitualmente 'La Foca', por lo que Jefferson le tocó llevar el mismo sobrenombre pero en diminutivo.

En el Cádiz español surgió uno de los apodos más recordados en el mundo del fútbol: Nenad “Mortadelo” Mirosavljevic. El croata llegó a España y desde el primer día sus compañeros lo compararon con Mortadelo, un personaje muy famoso de las caricaturas. Además, se excusaron en que era más simple llamarlo así y no por su apellido, que es muy difícil de pronunciar.

Foto: El Pais

Mientras que el fútbol argentino también fue cuna de apodos memorables que sorprendieron a propios y extraños. Uno de ellos es Gonzalo “Lavandina” Bergessio, delantero que jugó en Racing -uno de los futbolistas más determinantes en la historia académica- y que decidió teñirse el pelo de rubio. El día que apareció en el entrenamiento con la cabeza amarilla, uno de sus compañeros le preguntó si se le había caído un balde de lavandina en la cabeza. Mientras que por otro lado, uno de los arqueros más recordados es Carlos “Lechuga” Roa, protagonista en el Mundial de Francia 1998. Se ganó el apodo de Lechuga porque realizaba una estricta dieta vegetariana, que en aquella época era algo mucho más inusual que en la actualidad, y sus compañeros no se lo dejaron pasar.

Foto: AS