Italia reconstruyó su esencia, después de no clasificar al Mundial de 2018. De la mano del técnico Roberto Mancini se creó un grupo de alma imbatible, que se convirtió en el primer finalista de la Eurocopa 2020.
En una emocionante definición por penaltis, el país de La Bota venció 4-2 a España, en Wembley, con lo que ganó su boleto a la final del domingo.
Te podría interesar
Ahora busca proclamarse campeón de la Euro, luego de 53 años de no hacerlo, a pesar de llegar a tres finales en este siglo.
La Squadra Azzurra ya había superado su mejor registro de invicto, cuando entre 1935 y 1939 sumó 30 partidos sin derrota. Tras el empate 1-1 de ayer en el tiempo reglamentario, incrementó su cuenta a 33 juegos de imbatibilidad, por lo cual está a dos cotejos de la marca de La Roja (2009) y Brasil (1996).
Si bien el carácter ofensivo ha sido una de sus fortalezas en esta Euro, con 12 tantos, ayer el cuadro italiano apeló a su tradicional catenaccio (cerrojo).
El primer gol del duelo llegó al 60’, con un disparo de Federico Chiesa. Pero, cuando Italia se replegó, el criticado Álvaro Morata puso el empate para España, al 80’, que propició los tiempos extra y los penaltis, en Inglaterra.
Desde los 11 pasos, el mismo jugador de la Juve falló, al igual que Dani Olmo, y por la Azzurra acertaron Andrea Belotti, Leo Bonucci, Federico Bernardeschi y Jorginho, para que dieran un paso más al título.
Por J. Alexis Hernández
MAAZ