SUPER BOWL LV

Los cerebros del Super Bowl LV

Los coaches Andy Reid y Bruce Arians mueven la estrategia para obtener el título

DEPORTES

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Arians ha tenido que librar problemas de salud por un cáncer de próstata. Fotoarte: Marco FragosoCréditos: Marco Fragoso

Son las mentes detrás del show. Gran parte del espectáculo se debe a ellos. Dos coaches veteranos, pero de diferente experiencia, se verán las caras en el Super Bowl LV. Andy Reid defiende la corona ante Bruce Arians.

EL HC de los Chiefs obtuvo frutos el año pasado, cuando ganó su primer título desde que empezó como entrenador en jefe, en 1999.

Antes de ser entrenador titular, fue el encargado de la línea ofensiva en varios equipos del futbol americano colegial. Durante la década de los años 90, en Green Bay, formó parte de aquel conjunto que ganó el Super Bowl XXXI en 1997, al lado de Mike Holmgren.

En 14 años al frente del equipo de los Eagles obtuvo en tres ocasiones el nombramiento de Entrenador del Año. Ganó 140 partidos. Su trago más amargo: haber perdido el Super Bowl, en 2005, ante los Pats de Brady.

Debut con Chiefs

Luego de arrancar con marca de 11-5, en 2013, en su debut con los Chiefs, supo guiarlos al título en 2020, tras 50 años de sequía; dos temporadas después de reclutar a Patrick Mahomes.

En tanto, a sus 68 años, y poco más de siete temporadas como head coach, Bruce Arians tiene su primera oportunidad para ser campeón como entrenador en jefe, aunque ya ganó dos títulos en el cargo de coordinador ofensivo con el escuadrón de Pittsburgh.

Él fue quien diseñó el ataque de los Steelers en el Super Bowl XLII, en aquella histórica atrapada de Santonio Holmes ante Arizona, precisamente en el Raymond James Stadium.

Arians ha tenido que librar problemas de salud por un cáncer de próstata, que lo llevó a abandonar a los Cardinals en 2017.

Tampa Bay lo sacó de su descanso, y tras un 7-9 en 2019, hoy está cerca de la gloria. “Si no arriesgas, no hay galleta. Vive sin miedo”, es la filosofía de un inspirado coach, quien ha vuelto a la vida y descarta por ahora la palabra “retiro”.

Por Óscar Zamora