Después de que el año pasado el Maratón de la Ciudad de México se cancelara por el coronavirus, la fiesta deportiva de la capital regresa mañana con su edición 38.
El recorrido de 42.195 kilómetros sale de la Avenida Insurgentes Sur, entre la Biblioteca Central y el Estadio Olímpico Universitario, y la meta se ubica en el Zócalo de la Plaza de la Constitución.
En esta ocasión, el edificio tradicional al que se le hace homenaje es el Monumento a la Revolución, por lo que la medalla que se otorga lleva su imagen y forma parte del rompecabezas de seis sitios representativos de la Ciudad de México.
Los ganadores de la pasada edición, celebrada en 2019, fueron los keniatas Duncan Maiyo y Vivian Kiplagat, quien logró el récord de la competencia en la rama femenil, con dos horas, 33 minutos y 27 segundos.
En los hombres, el poseedor de la marca es el también africano Titus Ekiru, con un registro de dos horas, 10 minutos y 38 segundos.
La carrera pasa, entre otros lugares simbólicos, por el Castillo de Chapultepec, el Palacio de Bellas Artes, la Torre Latinoamericana y el Templo Mayor.
El gobierno capitalino tiene varias medidas para antes y después del evento en cuestiones de movilidad y salud, para bienestar de los corredores y los espectadores que presencien la carrera.
Se calcula que hay más de tres mil 600 elementos disponibles del gobierno de la CDMX para poner orden en el maratón, y cada 2.5 kilómetros se encuentra un punto de revisión médica por cualquier percance que pueda ocurrir.
Cabe recordar que la competencia tiene la categoría Elite de la Federación Internacional de Atletismo, por los registros cronometrados, que la hacen la más importante de Latinoamericana; así como el certificado por sustentabilidad Evergreen, por el uso de materiales que protegen el medio ambiente y el reciclamiento de los residuos que se generan.
MAAZ